Tasa de interés: qué hará el BCRA y para qué la usará
El Gobierno de Javier Milei busca administrar la cantidad de pesos en la economía y la liquidez del sistema bancario mediante un complejo esquema complementario de emisión cero, intervención cambiaria, y tasa de interés flotante de las Letras Fiscales de Liquidez (LeFi). Así, cumple con dos objetivos centrales: mantener a raya la brecha cambiaria y los dólares financieros, y, por otro lado, ponerle un tope a la base monetaria.
El Directorio del Banco Central no se reunirá hoy, ni decidirá una suba de tasas de política monetaria en el corto plazo. A días del debut de las LeFi, que funcionaron como una suba indirecta e implícita por la exención de Ingresos Brutos, en la entidad y en el mercado consideran que hay espacio para continuar con el 40% de Tasa Nominal Anual (TNA).
"El Gobierno parece estar priorizando la intervención en el CCL como principal herramienta para bajar el dólar y controlar la base monetaria; lo que quita presión a hacer esto mediante una suba de tasas", explica a El Cronista Juan Pedro Mazza, estratega de renta fija de Cohen.
El escenario base de Econviews tampoco contempla una suba de tasas, más allá del impacto inicial de las LeFi en cauciones y fondos money market. Desde PPI consideran que los últimos anuncios del Gobierno buscan comprimir las brechas "desde arriba hacia abajo", "a través de ratificar el compromiso de intervenir en el mercado financiero con una oferta potencial de u$s 1800 millones".
Pese a que no haya un aumento de tasas en el horizonte, la tasa flotante de las LeFi será una herramienta central de la política monetaria en la Fase 2 del programa económico. La utilizará para controlar la liquidez de los bancos y la base monetaria. Pero también podría usarla para reducir la brecha cambiaria.
"Las LeFI son instrumentos a tasa flotante ya que sus intereses se capitalizan diariamente a la Tasa de Política Monetaria (TPM) del BCRA. El nivel de la tasa de interés será uno de los principales factores que los bancos tendrán en cuenta a la hora de definir si comprarle o venderle LeFi al BCRA. A mayor tasa, mayor será el incentivo a comprar estas nuevas letras (y viceversa)", explica Mazza.
A través de la tasa, el BCRA puede controlar la base monetaria. Si quiere reducir la cantidad de dinero circulando en la economía, puede elevarla e incentivar a los bancos a deshacerse de los pesos. De la misma forma, puede bajar la tasa con el objetivo de aumentar la oferta monetaria.
"El directorio del BCRA regulará la liquidez del sistema bancario estableciendo el nivel de la tasa de interés de las LeFi y la tasa de pases activos, basándose en la programación monetaria del BCRA", informó esta semana la entidad en un comunicado.
Actualmente, la Tasa Efectiva Mensual de las LeFi es de 3,34%, por debajo de la inflación mensual de junio de 4,6%, por lo que no implica un aumento del costo financiero en términos reales para el Tesoro.
Si decide subirla, implicará menos pesos circulando en la economía, pero más presión al programa de sostenibilidad fiscal. Esa presión podría ser interpretada por los mercados como demasiada alta, por lo que aumentaría el riesgo país ante la percepción de la dificultad del Tesoro en aumentar el superávit para afrontar sus compromisos.
El BCRA considera que la manera virtuosa de reducir el stock de LeFi es que los bancos desarmen sus posiciones para prestar esos fondos al sector privado. "En esa medida, la deuda bruta del Tesoro podrá disminuir", prevé la entidad.
La duda, entonces, es si esa decisión contribuirá a la reactivación económica o, por el contrario, será consecuencia de ella.