World News in Spanish

Hoy, fiesta discontinua de Santiago

Abc.es 

Tiempos difíciles aquellos en que se tiene que demostrar lo evidente. Y hoy debería ser del todo evidente que fuese día de fiesta en toda España, por celebrarse la festividad de nuestro Señor Santiago . Pero no. No es fiesta oficial como lo fue años atrás, lo que en no poca medida contribuye a cuartear un poco más la idea de España como nación para gozo de quienes ponen su mayor interés político, social y personal en romperla. Ayer mismo el presidente Pedro Sánchez aceptaba otra exigencia más de ERC para que Salvador Illa pudiese alcanzar la presidencia de la Generalitat. No tuvo inconveniente en desplazarse a Barcelona para formalizar el traspaso de la gestión del ingreso mínimo vital que queda en manos de la Generalitat catalana. El decorado ante el que se sentaban Sánchez y Aragonés estaba calculado al gusto del separatismo y el consentimiento monclovita. Las banderas española y catalana aparecían separadas y situadas detrás de cada uno de ellos. Un análisis de esa puesta en escena hecho por quien conoce de protocolos, revelaría que se trataba de una reunión de dos representantes de naciones distintas. Hoy, para goce de indepes y separatistas, los españoles en su conjunto no celebrarán la festividad de su patrón . Una fiesta que los mandamases han convertido en fija discontinúa. Sólo lo será en Galicia, Cantabria, País Vasco, Navarra y Madrid. Otra muesca más en el revólver de los que disparan contra España. Los mismos que tienen en sus manos los números que le faltan a Pedro Sánchez para cantar bingo y al que le cantarán las bolas cuando y como ellos quieran. Y si Pedro se les pone esquivo, amenazan con romper el cartón, tumbar la mesa y derribar el bombo. Al señor Santiago se le priva de que su día mayor se pueda celebrar en toda España. Y los peregrinos que culminan su camino llegando hasta su catedral, seguirán viéndose privados de poder darle el abrazo, porque desde el Covid ya no está permitido hacerlo. En el caso de los valencianos es la onomástica de nuestro rey conquistador Jaime I , así bautizado por la determinante voluntad del santo, según relata el cronista Ramón Muntaner, que refiere cómo la madre del rey, María de Montpellier, se decantó por el nombre de Santiago por ser la suya la última en apagarse entre las doce velas, cada una con el nombre de un apóstol, que la reina madre encendió buscando la complicidad apostólica para decidirlo. Pero si los valencianos hemos renunciado a celebrar en nuestro Reino de Valencia la festividad del más importante paisano como lo es san Vicente Ferrer, que ha quedado reducida a fiesta local, no debemos extrañarnos que también hayamos devaluado la de nuestro Señor Santiago. Tampoco el clero contribuye a darle el realce que se merece el patrón de España. Ayer mismo, una cuñada celosa por cumplir con sus obligaciones con la Iglesia, me preguntaba si el de hoy era día de precepto. Se me ocurrió llamar al Arzobispado de Valencia. Era ya por la tarde, a esa hora en que por regla general nos llaman para ofrecernos cambiar de compañía eléctrica o de telefonía. Temí ser confundido con alguno de esas impertinentes empresas, pero no. La persona que amablemente atendió mi llamada dijo ser el conserje y por desconocer la respuesta a mi consulta me recomendó llamar a la catedral para ser informado. Preferí enviar vía whatsapp la pregunta a un reverendo que forma parte del círculo de amistades familiares. Su respuesta no aclaró mis dudas: «Sí que es (de precepto) pero al no ser festivo no hay tantas celebraciones». Otra consulta, planteada en un chat siempre animado, fue contestada por un colega periodista: «Un sacerdote de mi parroquia me confirma que no es día de precepto. Otra cosa es que a nivel particular y por devoción…» Y dos respuestas más del todo antagónicas: «No está declarado de precepto, aunque es festivo en la Curia». Y la otra: «Tengo entendido que es precepto en toda España, determinado por la CEE (Conferencia Episcopal Española). Tampoco el Rey Felipe VI , cuyo antecesor Felipe IV instituyó la ofrenda a Santiago en el año 1643, será en esta ocasión quien la haga, habiendo delegado en el presidente del Parlamento de Galicia, Miguen Ángel Santalices Vieira. Me temo que nuestro Rey se puede haber visto obligado a hacer esa delegación de funciones por indicación expresa o sugerencia no menos expresa de La Moncloa. Hago constar que lo menciono como maledicencia del arriba firmante, pero conociendo como se las gasta Pedro Sánchez, sería una más de sus envidiosas jugarretas. Sea culpa de quien sea el que hoy no sea festivo en toda España, o que un malandrín impida que el Rey Felipe VI esté hoy en la capital compostelana, digan conmigo sin complejo alguno: ¡Viva nuestro Señor Santiago, patrón de España! Y que nunca nos falte su protección y amparo. Amen.

Читайте на 123ru.net