Tom Aspinall reveló en una entrevista para
Ariel Helwani que
sumergía todos los días sus manos en gasolina para endurecer los nudillos. Esta técnica es un viejo truco que,
el linaje gitano que campó por el país en las peleas de boxeo sin guantes del pasado siglo,
adoptó como ritual para poder vencer a sus rivales de una manera más eficaz. Sin embargo, en un video revelado por el propio peleador en redes sociales,
todo ha resultado ser un pequeño 'trolleo' del inglés al periodista, que reaccionó entre risas al descubrir toda la verdad sobre las declaraciones de
Honey Badger la semana pasada en su show.
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