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Hora de ponerse a trabajar

Transcurridos dos años y tres meses de gobierno, muchos costarricenses esperan que el presidente que prometió “comerse las broncas” finalmente cumpla su palabra.

Mientras el gobierno insiste en desperdiciar tiempo en su fracasada “ley jaguar”, muchos costarricenses esperan que el presidente que prometió “comerse las broncas” finalmente cumpla su palabra.

En este momento, hay enfermos que deben aguardar hasta 1.000 días para someterse a un trasplante de hígado en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).

Se trata de una espera cruel y desesperante que mantiene en vilo a los pacientes y sus familiares, pero nadie parece tener una solución clara para acortarla.

Por otra parte, miles de asegurados sufren las consecuencias del rotundo fracaso de los planes de las autoridades de la CCSS para reducir las listas de espera en los hospitales.

La denominada Ruta de la Salud, como otras tantas iniciativas de esta administración, nunca pasó de ser una caja de Pandora cargada de ocurrencias sin sustento técnico ni financiero.

En tanto, los pobladores de muchas comunidades golpeadas por la violencia claman por acciones contundentes para frenar la arremetida del crimen organizado.

Por más pompa con que se anunció la Ruta de la Seguridad, todo parece indicar que el 2024 mantendrá una tasa de homicidios similar a las cifras históricas del 2023.

Ese es el nefasto precio que el país deberá pagar por los recortes presupuestarios aplicados a los cuerpos policiales, en medio de su carencia de uniformes, personal y equipos adecuados.

Además, recordemos que el Poder Ejecutivo bloqueó durante los pasados tres meses la agenda de seguridad ciudadana en el Congreso para dar prioridad a su fallida “ley jaguar”.

La opinión pública también sigue esperando que esta administración divulgue y ponga en marcha la Ruta de la Educación para atender la peor crisis educativa de los últimos 40 años.

Diagnósticos realizados por universidades públicas y privadas evidencian que las medidas aplicadas hasta ahora no han logrado reducir el profundo rezago que arrastra toda una generación.

La señora de Purral, al igual que el resto de los consumidores, sigue esperando que llegue el día prometido en que la Ruta del Arroz logre bajar el precio del grano.

En resumen, la columna de deberes supera en forma colosal la lista de haberes. Señor presidente, es hora de dejar de lado las excusas, los berrinches y las cortinas de humo; hay que ponerse a trabajar.

rmatute@nacion.com

El autor es jefe de información de La Nación.

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