World News in Spanish

Operación CCSS

La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) recauda menos cuotas, atiende a poblaciones vulnerables no contribuyentes, paga más pensiones debido a la deformación de la pirámide poblacional, compra medicamentos e insumos cada vez más caros y enfrenta una epidemia de víctimas de accidentes y de violencia civil nunca antes vista.

Por otro lado, el Estado deja de pagar su parte, el personal está desgastado, los médicos jóvenes evaden las residencias o buscan las de corta duración, los especialistas se van y, para colmo, las listas de espera no dejan de crecer. ¡Qué difícil situación!

Las enfermedades de los pacientes se agravan, aumenta el riesgo quirúrgico, los estudios caducan, algunas personas fallecen esperando y pocos casos se resuelven.

Se necesita, por ende, atender dos problemas simultáneamente: la lista existente y evitar que se acumule una nueva. Sugiero:

Fortalecer la atención primaria: Los médicos en los Ebáis deben ocuparse de los problemas de quienes los consultan y, dentro de lo posible, que la solución no sea una remisión. El Cendeisss debe reasumir su función de enseñanza y la institución debe proveer las guías y los equipos necesarios.

Virtualidad: En las oficinas centrales debería crearse más programas nacionales de telemedicina, manejados por especialistas que den apoyo al primer nivel de atención y consultas en remoto para evitar el desplazamiento de los pacientes.

Internamiento: La hospitalización es para los enfermos en situaciones considerables (enfermedades cardiovasculares, neuroquirúrgicas, comorbilidades, cáncer, etc.) y cuyo tratamiento solo pueda realizarse dentro del centro médico. Aquellos con problemas sencillos deben ser tratados y egresados de centros de cirugía y procedimientos ambulatorios, horas después de ser atendidos. Esos centros deben construirse estratégicamente en todo el territorio.

Apoyo al especialista: Los médicos generales deben ser instruidos para manejar a los pacientes estables provenientes de las consultas de los especialistas, y dejarles a ellos los pacientes que van por primera vez y los complicados; aunque esto se hace en algunos centros, debe explotarse más.

Formación y retención de técnicos y especialistas: Los técnicos requieren una formación larga y difícil, y son vitales en muchas especialidades; lo mismo ocurre con los médicos especialistas. La institución debe mantenerlos al día y velar por que trabajen con entusiasmo y empatía. Debe promoverse la especialización de los jóvenes y evitar que emigren. Para ello, es fundamental aumentar los cupos de residencia utilizando hospitales y clínicas fuera de la capital. También se debe ofrecer la posibilidad de permanecer en el ejercicio de la especialidad a individuos en edad de jubilación.

Medicina mixta: Debe estimularse, pues los enfermos, además del aporte obligatorio a la institución, eligen pagar extra para acelerar su atención. Así, quedan campos libres para los más necesitados. Si el paciente desea cuidado privado, la institución podría aportarle marcapasos, prótesis, dispositivos o algunos medicamentos caros con el fin de evitar su ingreso a la CCSS y con ello utilizar las camas para otros.

Credibilidad: Los profesionales de la CCSS deben aceptar referencias o resultados de estudios que el paciente traiga de una consulta privada, y no ordenar de rutina la repetición en la institución. La referencia de un especialista privado debe ser gestionada directamente en el servicio de referencia y no en un Ebáis. Muchas veces, los especialistas que se desempeñan y refieren desde el sector privado son también funcionarios de la CCSS. Repetir los análisis desperdicia tiempo y dinero.

Modalidad de pago: En algunas especialidades, resultaría más eficiente y económico para la institución pagar a sus funcionarios por producción o licitar la atención de grupos específicos de pacientes.

Convenios internacionales: Los pacientes con enfermedades de baja prevalencia y de alto riesgo podrían derivarse tempranamente a centros internacionales mediante convenios especiales.

Financiamiento: La CCSS debe fortalecer sus mecanismos de cobranza, y los ciudadanos debemos cumplir con las obligaciones patronales. Al gobierno le corresponde diseñar un mecanismo plausible para ponerse al día con sus obligaciones.

Algunas de estas ideas, y otras viables, pueden ponerse en práctica con relativa facilidad; otras requerirán un diálogo profundo entre las partes involucradas.

carjesa@gmail.com

El autor es especialista en cirugía cardiotorácica. Formó parte del Consejo Nacional de Investigación en Salud, la Camara de Salud y las juntas directivas del Colegio de Médicos y la CCSS.

Читайте на 123ru.net