La (pen)última felonía de Pedro Sánchez
El acuerdo impulsado desde Moncloa para que Illa acceda a la presidencia de Cataluña es un desastre sin paliativos, solo concebible en un individuo que se limita a primar sus propios intereses de corto plazo y se desentiende de los efectos a medio y largo. La solidaridad es un elemento capital del Estado y romperla es destruir sus fundamentos. Que Cataluña aduzca que tiene un déficit fiscal, que los demás le roban y que quiere cobrar el 100% de sus impuestos es como si lo dijeran los vecinos del distrito más rico de Barcelona, de Madrid, o los de la urbanización costera más elitista. Si ...