Fiebre boxística en alza
Entre los días 17 y 30 de agosto de 1974, La Habana organizó el primer Campeonato Mundial de boxeo amateur, al que asistieron 263 pugilistas de 45 países. Varios de los mejores del orbe participaron en esta exitosa lid, entre ellos el croata-yugoslavo Mate Parlov, el joven puertorriqueño Wilfredo Gómez, los soviéticos Vasily Solomin y Rufat Riskiyev y atletas de casa como Jorgito Hernández, Douglas Rodríguez, Emilio Correa, Rolando Garbey y Teófilo Stevenson. Todos ellos protagonizaron peleas de un elevado nivel boxístico ante la afición local.
Jorgito, Douglas, Correa, Garbey y Stevenson terminaron campeones en sus respectivas divisiones, más el subtítulo de Jorge Luis Romero y las medallas de bronce de Mariano Álvarez y Luis Echaide, la cosecha final de la nación sede en la habanera Ciudad Deportiva fue de cinco coronas, una plata y dos terceros lugares. Con esa actuación, Cuba se ubicó cómodamente en el primer lugar del medallero, seguida por la Unión Soviética (2-2-4) y Estados Unidos (1-2-1).
Cincuenta años después del histórico certamen, la capitalina Ciudad Deportiva volvió a recibir un evento boxístico internacional con calidad garantizada, la Noche de Campeones, celebrada este martes como parte de las actividades desarrolladas por la Mayor de las Antillas para festejar el Día Mundial de esta disciplina, cada 27 de agosto, en honor a la primera justa del orbe.
Los 12 púgiles que animaron la Noche de Campeones, velada de carácter profesional que acontecía al cierre de esta edición, cumplieron en la mañana de ayer el pesaje público efectuado en el Parque Central de La Habana, donde estuvo el legendario exboxeador panameño Roberto «Mano de Piedra» Durán, considerado entre los mejores de siempre a nivel mundial, libra por libra.
Respecto a lo informado la pasada semana, la cartelera sufrió dos cambios: el colombiano José Ignacio Muñoz (16 victorias y tres fracasos como profesional, según su perfil en BoxRec.com) sustituyó al uruguayo Eduardo Estela, y el dominicano Luis Antonio Tejeda (nueve éxitos, ningún revés y un empate) remplazó al bielorruso Aliaksei Alfiorau.
Luego de esas novedades, los enfrentamientos quedaron así: el actual monarca olímpico, el cienfueguero Erislandy Álvarez (63.5 kg), vs. Muñoz; el guantanamero Arlen López (80 kg) vs. Tejeda; el sureño Saidel Horta (57 kg) vs. el ruso Ruslan Belousov; el pinareño Lázaro Álvarez (63.5 kg) vs. el uzbeko Mujibillo Tursonov; el vueltabajero Roniel Iglesias (67 kg) vs. el armenio Gurgen Madoyan y el camagüeyano Julio César La Cruz (92 kg) vs. el uzbeko Madiyar Saydrakhimov. Los desafíos de Erislandy, Saidel, Lázaro y Roniel fueron a seis asaltos, mientras los de Arlen y Julio fueron a diez.
«Los pugilistas cubanos que participaron en los Juegos Olímpicos de París y estaban confirmados para la Noche de Campeones, llegaron al país y del aeropuerto fueron para la Escuela Nacional de Boxeo. Entrenaron mañana y tarde, de lunes a lunes. Hicieron un trabajo titánico los entrenadores y los atletas para poder adaptarse a los seis y diez asaltos, luego de pelear a tres rounds en París. Eso lleva un sacrificio muy grande, la preparación es diferente», aseguró Alberto Puig de la Barca, presidente de la Federación antillana de boxeo.