Histórico triunfo del palaciego José Antonio Rueda en el Gran Premio de Aragón de Moto3
El ganador número 400 de la historia del Mundial de Motociclismo es un sevillano de Los Palacios y Villafranca que se llama José Antonio Rueda . Este domingo, en el Gran Premio de Aragón, el duodécimo de la temporada en la categoría de Moto3, el joven talento palaciego de sólo 18 años ha dado toda una lección de pilotaje en el circuito de Motorland, en Alcañiz , para saborear su primera victoria, que le sabe a gloria tras un año repleto de dificultades (hasta de una apendicitis tuvo que ser operado), en el Mundial. Rueda se ha impuesto en una carrera muy exigente que a falta de nueve vueltas parecía decantada a favor del líder de la categoría, el colombiano David Alonso , que aventajaba entonces con mucha suficiencia a su inmediato perseguidor, el neerlandés Colin Veijer , quien a su vez mantenía una prudencial distancia de seguridad sobre un grupo de tres pilotos. Ahí, emboscado y a la expectativa junto al italiano Lunetta, se encontraba Rueda, sediento de gloria. Su fin de semana había sido excelente, siendo el único capaz de hacerle sombra en las clasificatorias a Alonso . El sevillano tenía muy buen ritmo y fue a más, apoyado en la acertada elección de sus neumáticos duros, para comerle poco a poco terreno en cada giro a los dos líderes hasta que pudo darles el zarpazo para colocarse en la primera posición, de la que ya no se descolgaría para abrochar, así, una mañana histórica. Veijer y Lunetta lo acompañaron en el podio. Su padre lloraba -«ya le tocaba, ya le tocaba...», acertaba a decir nada más finalizar el Gran Premio- y al gran protagonista, su hijo José Antonio, casi ni le salían las palabras en uno de los días más felices de su vida. En declaraciones a DAZN, le costaba contener la emoción cuando se acordaba de su amigo Hugo Millán, piloto onubense que perdió la vida con catorce años precisamente en Motorland. « Lo primero que quiero es darle las gracias a mi amigo Hugo y dedicárselo a él . Estoy muy contento. Le doy también las gracias a todo mi equipo. Es algo muy especial para mí ganar en este circuito, es increíble», valoraba. El triunfo lo redime de todos los problemas que ha superado esta temporada: «La verdad es que ha habido de todo: una operación de apendicitis, caídas, cinco ceros en un campeonato, que es algo que no me había sucedido nunca... Cuando supe que habían puesto a este circuito de nuevo en el Mundial, me alegré mucho porque siempre se me ha dado bien . Le doy las gracias a mi equipo, a Hugo y a toda la gente que me apoya -reiteró-. En la última vuelta ya no sentía ni los brazos, de la presión que tenía por querer ganar después de tanto tiempo, y más en este circuito. Tengo hasta ganas de llorar. Hemos peleado mucho por llegar hasta aquí y esperamos que siga así», comentaba el sevillano, visiblemente emocionado. El palaciego José Antonio Rueda ha escrito este domingo c on letras de oro la historia del motociclismo sevillano al conseguir su primera victoria en el Mundial en su 32ª gran premio en Moto3. Partiendo de la segunda posición de la parrilla tras la Q2 del sábado (primero fue Alonso y tercero, su paisano Muñoz), el sevillano ha protagonizado una carrera espectacular demostrando que tiene mucho talento y también moto en el Red Bull KTM Ajo . El triunfo en tierras aragonesas lo coloca sexto de la clasificación con 99 puntos. El otro sevillano de Moto3, el brenero David Muñoz , acabó séptimo y es quinto de la general con 117 puntos. Rueda, que se inició desde temprana edad en una escuela de Alcalá del Río y fue campeón del mundo júnior y también de la Red Bull Rookies Cup en 2022, acabó el año pasado noveno del Mundial con 122 puntos y un podio, logrado en el Gran Premio de Cataluña. El palaciego, que cumplirá los 19 años en octubre, es el jefe de filas de su equipo, después del ascenso del turco Deniz Öncü a Moto2. Esta temporada, tras caerse en Qatar, ser segundo en Portugal, perderse las dos siguientes citas del calendario por la ya citada intervención quirúrgica, acabar octavo en Le Mans, tercero en Montmeló , decimoquinto en Mugello, cuarto en Assen, caerse de nuevo en Alemania, ser noveno en Silverstone y séptimo en Austria, Rueda ha plasmado al fin en Aragón todo su talento con una victoria que jamás olvidará y queda ya para la historia del motociclismo sevillano y andaluz.