El informe interno del Gobierno sobre el trasvase Tajo-Segura confirma la privación de agua desde hace décadas
El informe interno del Ministerio de Transición Ecológica y Transición Demográfica sobre el trasvase Tajo-Segura elaborado para el reparto de agua desalada de Torrevieja entre los regantes revela la privación de caudales que han sufrido en el campo alicantino, murciano y almeriense desde hace décadas . Además de reconocer que en el futuro no habrá transferencias suficientes para el sector, tal como publicó ABC , este documento de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) incluye referencias al pasado del acueducto, en el que confirma lo que los agricultores vienen denunciando desde hace tanto tiempo: que nunca ha llegado el agua prometida . La realidad actual, con la que se justifica la asignación de caudales de la desalinización, que se tiene previsto ampliar en la planta de Torrevieja -la más grande de Europa- hasta los 120 hectómetros cúbicos al año, se resume con esta frase: «La mejora de la situación de infradotación y falta de garantía de los regadíos del trasvase Tajo-Segura». Esta coletilla se incluye en el expediente de cada una de las 46 comunidades de regantes evaluadas para recibir este futuro volumen hídrico, aún no generado, con sólo una excluida por « incompatibilidad », precisamente la de San Miguel de Salinas , donde se construirá una macroplanta solar para dar energía a la producción de agua desalada en Torrevieja. En la descripción de cómo se ha llegado a esta situación de déficit de recursos, figura este dato de recorte año tras año del volumen que inicialmente se estipuló para transferir del Tajo al Segura: 421 hm3. En la práctica, la media se ha quedado en la mitad, en 224 hectómetros de media, en ocasiones por la sequía y falta de reservas en los embalses de la cabecera del Tajo -Entrepeñas y Buendía-, pero otras veces ha sido por recortes discrecionales decididos por el Ministerio, que tiene esa potestad en ciertos niveles intermedios de agua en los citados pantanos. En esta «nota interna», no se entra en estas razones, no hay análisis. Aparte de esos dos factores principales, vista en perspectiva la evolución de las normas de explotación del acueducto, hubo otro condicionante hace ahora justo una década, como fue la elevación del umbral mínimo para cerrar el grifo de los trasvases, desde 240 a 400 hm3. Como no ha sido suficiente para conseguirlo. Actualmente, con la normativa vigente, el Ministerio puede adoptar medidas de emergencia, como este envío de recurso de la desalinización, con carácter general para todo el campo del Segura, no sólo los dependientes del trasvase. «Adicionalmente resulta posible asignar estas aguas para eliminar situaciones de insostenibilidad actual debida a la sobreexplotación existente en los acuíferos, y restablecer el equilibrio del medio intentando, en la medida de lo posible, la subsistencia de los aprovechamientos vinculados a estos acuíferos», señala este informe. No obstante, pone el foco precisamente en los agricultores usuarios del acueducto: «De acuerdo con las condiciones de la convocatoria, esta sobreexplotación quedaría restringida a la existente en las zonas regables del Trasvase Tajo-Segura».