Fernando Adrián y Borja Jiménez, un mano a mano de los triunfadores de la temporada: «Cuando estás en la arena no hay nadie que te pueda manipular»
Los únicos matadores que han abierto la puerta grande en San Isidro, Borja Jiménez (en el ciclo isidril) y Fernando Adrián (en la Beneficencia), y principales triunfadores de la temporada, han protagonizado un mano a mano a modo de coloquio, previo a verse las caras en el ruedo de Las Ventas el próximo sábado, en una tarde de máximo interés, como se ha podido comprobar en esta charla, llena hasta la bandera. Con toros de Victoriano del Río, ambos toreros rivalizarán en una plaza que conocen muy bien: cinco puertas grandes suman entre los dos en apenas dos temporadas. Muchos mano a mano han pasado a la historia de Las Ventas, como el de Julio Robles y Ortega Cano, o el que protagonizaron Rincón y Ponce . ¿Por qué no éste? Dios dirá, pero «esperemos que diga cosas buenas», como dice Borja. Los dos triunfan tarde a tarde, y casi no sabe lo que es salir a pie esta temporada, ganándose, por méritos propios, el sentarse en la mesa de las figuras, lugar que ocuparán en breve. «Me estoy encontrando muy bien y eso me da confianza de cara al sábado», explica un tranquilo Borja, con la mano escayolada. Por su parte, Fernando podría entrar en el Libro Guinness, con el mayor número de salidas en hombros consecutivas, seguramente: « Los resultados hablan esta temporada », explica el torero, que espera poder expresarse con un toro el próximo 5, porque « poder realizar lo que uno lleva dentro es algo maravilloso. Cuando estás en la arena no hay nadie que te pueda manipular ». «Es una cita muy importante para los dos en muchos sentidos», explicó el sevillano -que tiene un dedo de la mano roto, y así toreará tres toros-, tras la presentación de Marta Manzano. Ambos llevan carreras casi paralelas, por lo que «va a ser un día muy emotivo para los dos, y nos podemos sentir muy orgullosos de lo que estamos haciendo y de estar aquí», dijo Borja. Adrián aseguró que ambos matadores darán la entrega y verdad que Madrid merece (y que acostumbran a mostrar), porque «esta plaza es única, especial y es la que saca a toreros como Borja o yo. Sólo espero que sea una tarde recordada porque esta plaza lo merece y nuestra temporada también ». Los dos saben lo que es estar años en el banquillo, pero lejos de quejarse, sacan el lado positivo: «Por la dureza, la cabeza se ha hecho más fuerte y me he ido marcado lo que quiero con más claridad », explica Jiménez, que nunca ha dejado de entrenar pese a la frustración de no torear casi en seis años. Para Fernando, ese 'lado oscuro' ayuda a madurar: «Siempre le doy las gracias a Dios por lo que he sufrido, porque eso me ha hecho tener la cabeza en lo que hay que tenerla. Te vas encontrando muchísimas piedras, pero eso te curte y te hace madurar». Adrián ganó la primera edición de la Copa Chenel, y Borja fue finalista de la pasada edición, lo que les sirvió para dar un importante toque de atención. Y después llegaron sus primeras puertas grandes en la Monumental venteña, la más especial para los dos toreros por muchos motivos, en especial para Borja por «ver a mi madre, que no suele venir a verme, al salir en hombros. Es una de las anécdotas más bonitas que me van a pasar en una plaza de toros, y, de momento, es lo más bonito que he vivid o ». Curiosamente, algo parecido le ocurrió al madrileño: «Le brindé el toro -que desorejó- a mi madre, le dije unas palabras de todo corazón, y cuando iba al animal, pensé: «como no lo cuaje, menudo petardo va a ser, después de habérselo brindado». Y cuando llegué a la furgoneta ya estaba ella. Fue la primera en darme un beso, no sé cómo llegó tan rápido». Pero los dos toreros no tienen más que un secreto: vivir por y para el toro. Eso les hace entrenar día y noche, y no pensar en otra cosa. «Es duro, porque te tienes que quitar hasta de tu familia, y a veces tus padres no lo entienden. Pero tiene que ser así, cuando uno quiere lograr algo en la vida te tienes que quitar de todo y centrarte de verdad . Hay que ser muy humilde con uno mismo y tener claro que no todo se consigue pese a eso, pero ayuda a aprender», explica Adrián, mientras Borja asiente. El sevillano también ha dejado a su familia para mudarse a Salamanca. Allí entrena con Julián Guerra, que «me apoderó hace años cuando nadie confiaba en mí, y le tengo que agradecer mucho. Estoy muy contento con su gestión y su trato. Es fundamental tener una persona de máxima confianza al lado », como también explica Adrián: «Para los despachos tengo a mi apoderado, y yo sólo pienso en seguir creciendo como torero, para que, el día que me tenga que vestir de torero, no tenga que pensar en esas cosas que a veces ensucian esta importante profesión». Al finalizar el acto, se presentó el cartel de la novillada sin caballos del certamen ' Camino hacia Las Ventas ', que apadrinaron Adrián y Jiménez, y que se celebrará el próximo 12 de octubre por la mañana, con López Ortega, Rafael de la Cueva y Juan Pablo Ibarra. Víctor Zabala, principal artífice del certamen, Miguel Abellán y Justo Algaba, que donará un traje al triunfador, intervinieron para desear suerte a los tres chavales, y remarcaron el gran nivel de esta edición, así como la gran difusión que ha tenido, gracias a Tauromaquia Joven.