Diez años de las tarjetas black de Caja Madrid y más de siete desde el suicidio de Blesa
España es un país de pícaros. El 8 de octubre de 2014 el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu decidió imputar a la antigua cúpula de Caja Madrid, entidad entonces ya integrada en Bankia, por el uso irregular de las tarjetas black de empresa. Ninguno de los escándalos financieros de la historia reciente -Rumasa, Banca Catalana, Ibercorp, Gescartera o Martinsa- tuvo un impacto comparable en la opinión pública. Ahora se cumple una década desde que los 65 directivos que se sentaron en el banquillo —inicialmente eran 86 los imputados— pasaron por 120 horas de juicio y 26 se ...