La intención es lo que vale... pero no cuenta
Me creía envuelto en un sueño y resulta ser una pesadilla la que le toca vivir a esa enfermera “antivacunas” que trabajaba en pediatría y según los medios en su centro y ante los padres hacia el amago de vacunar a los niños; se dieron cuenta de que pinchaba, pero no inyectaba y hoy a los dos años lo denuncian.