Cómo librarse de una pelea si eres ratón: pon a una hembra como distracción
Si la ratonas supieran algo de cómo funcionan las relaciones en 2024, esto sería una 'red flag' en toda regla. Un grupo de investigadores de la Universidad de Delaware (EE. UU.) ha comprobado que entre los ratones, los machos utilizan a las hembras como reclamo para evitar ser atacados por otros machos agresivos. Cuando un 'matón' se enzarza con uno, la víctima corre hacia una hembra e interactúa brevemente con ella para que su perseguidor se distraiga, se centre en la atractiva compañera y así librarse del hostigamiento. Resulta que esta táctica, que los autores han denominado de 'señuelo y cambio', es la que mejor funciona para evitar el conflicto. Según explican en la revista 'PLOS Biology' , los investigadores registraron la interacción de grupos de dos ratones machos y dos hembras durante cinco horas. Como muchos otros animales, los ratones tienen jerarquías sociales y, en casi todos los grupos registrados, un macho siempre fue significativamente más agresivo con el otro. Las interacciones sociales, dicen los autores, pueden resultar difíciles de estudiar objetivamente, por lo que decidieron utilizar un enfoque de aprendizaje automático para analizar cómo se producían y resolvían las agresiones. En total, observaron más de 3.000 altercados entre los machos, y el algoritmo de aprendizaje automático ayudó a los investigadores a determinar las respuestas más probables a la agresión y si estas acciones resolvieron o, por el contrario, profundizaron el conflicto. Los científicos descubrieron que el ratón macho que se enfrentaba a una agresión solía correr hacia una de las hembras. Puede tratarse de una táctica de «señuelo y cambio», ya que el macho agresivo normalmente seguía al otro macho pero luego interactuaba con la hembra en lugar de continuar el ataque. Algunas otras tácticas, incluso si evitaban la agresión por un momento, luego escalaban hasta convertirse en peleas totales. Sin embargo, los investigadores descubrieron que esto no era así después de la estrategia del señuelo. Si bien puede ser una forma eficaz de reducir la intensidad de los conflictos, el 'truco' puede suponer costes para la víctima, como sacrificar tiempo con las hembras. Con todo, con un hembra presente, las peleas rara vez ocurrían, los ratones macho a menudo se mantenían más alejados entre sí y el ratón agresivo continuaba interactuando con la hembra. Este comportamiento masculino es propio de las sociedades de los roedores, pero cuántas veces las vivencias de los animales son extrapolables a las nuestras.