El BNG intenta, a la desesperada, negociar la comisión sobre los contratos de la Xunta

Este viernes se reúne la comisión de investigación sobre la contratación pública de la Administración autonómica con un único orden del día: aprobar el plan de trabajo. Así se acordó este jueves en la reunión de la Mesa de la comisión, que fue, nuevamente, motivo de tensión en la Cámara. Concretamente, fue la formación nacionalista la que, a la salida del encuentro, arremetió contra los populares por, según afeó ante los medios el diputado Luis Bará, tratar de convertir el procedimiento en una «comisión de exculpación y justificación». Todo ello después de que el día anterior también se viviesen momentos de crispación en el Parlamento por el mismo motivo: mientras que el BNG acusa a al PPdeG de «boicotear» la comisión y negarse a negociar el plan de trabajo, el grupo mayoritario asegura que la formación de Ana Pontón está intentando dilatarla pese a pedir agilidad de puertas para afuera. Tras reunirse la Mesa de la comisión –con las populares Elena Candia y Carmen Pomar como presidenta y vicepresidenta–, el diputado nacionalista Luis Bará, que ocupa el cargo de secretario, arremetió con dureza contra lo que definió como un intento de «boicotear el funcionamiento de la comisión». Para su formación «está claro que lo que quiere el Partido Popular» es «adulterar la función y el objetivo de la comisión», para que en vez de ser una «comisión de investigación de la Administración de la Xunta del PP» sea «una comisión de exculpación y justificación». De este modo, el Bloque volvió a denunciar que el grupo popular se negó a negociar el plan de trabajo, y que, en cambio, plantearon una propuesta de «forma unilateral», la suya. Algo «alucinante», que supone «el veto de las propuestas de los otros grupos» y que, aseguran desde la formación, no tiene «precedentes en la historia del Parlamento». Por su parte, fuentes del grupo popular explicaron que lo habitual es partir de la propuesta del grupo mayoritario y negociar cambios en base a ella, algo que es posible hacer hasta su aprobación en la reunión de la comisión, prevista para este viernes por la tarde. Asimismo, aseguran que por su sede en la Cámara, a jueves, aún no se había pasado ningún miembro de los grupos de la oposición para negociar y puntualizaron que esa no es la función de la mesa, que opera como organismo de dirección e impulso de la comisión y en base a los acuerdos adoptados por la misma. En todo caso, con la idea de «negociar hasta el último minuto», el jueves por la tarde los nacionalistas remitieron a todos los grupos una convocatoria de reunión urgente, para «agotar todas las líneas de diálogo e intentar llegar a un acuerdo». Al ser una comisión impulsada por el Bloque, como indicó Bará, considerarían « un escándalo mayúsculo « que no se aceptase ninguna de sus propuestas de comparecencia, que se establecen en el plan de trabajo, como la del líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, o la de su hermana, directiva en la delegación del noroeste de la empresa Eulen. La cita, indicaron, está prevista para el viernes por la mañana y, según explicaron fuentes consultadas por Ep, acudirán tanto populares como socialistas. Quien no lo hará es el diputado de Democracia Ourensana, Armando Ojea, al coincidirle con el pleno del concello de Orense. También este jueves, la secretaria general del PPdeG, Paula Prado, secundó las acusaciones hechas el día anterior por el portavoz parlamentario del grupo, Alberto Pazos, denunciando que el BNG está intentando «frenar» la comisión cuando fue esta misma formación la que «pidió agilidad». Una petición con la que el partido, aseguró Prado, está cumpliendo, con el fin de que «la comisión sea útil para el objetivo que buscamos todos, que es la máxima transparencia».