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El Govern constata el "malestar" por la vivienda pero rechaza una huelga de alquileres: "No es el camino"

Tras la protesta de Barcelona, la Generalitat insiste en su hoja de ruta para ampliar el parque público de vivienda hasta el 15% en Catalunya

Masiva manifestación en Barcelona por el derecho a la vivienda: “Se acabó, bajemos los alquileres”

El Govern ha reafirmado su apuesta por ampliar el parque público de vivienda tras tomar nota del “malestar” expresado en la masiva manifestación de este sábado en Barcelona, aunque ha rechazado la huelga de alquileres que quiere organizar el Sindicato de Inquilinos.

Así lo ha explicado en declaraciones a RAC-1 la consellera de Territorio, Sílvia Paneque. “La huelga de alquileres no es el camino del Govern”, ha señalado la portavoz de la Generalitat, que ha insistido en que la vivienda “es el principal problema de los catalanes y el principal reto” de su Ejecutivo.

El día después de la marcha de Barcelona, que ha sido la última de un ciclo de movilizaciones por la vivienda en las grandes ciudades de España, ha constatado que las posiciones entre el Govern y el Sindicato de Inquilinos están alejadas a la hora de proponer soluciones frente al problema de los alquileres.

Paneque ha insistido en que la vía del Ejecutivo pasa por incrementar la oferta y “asegurar un 15%” de parque de vivienda público. “Tenemos que ampliar el parque de vivienda público para asegurar el acceso a la vivienda asequible”, ha reiterado. El porcentaje de vivienda social pública en Catalunya se sitúa alrededor del 2% del parque, frente a la media europea del 15%.

Las demandas del Sindicato de Inquilinos, en cambio, van más dirigidas a una intervención fuerte del mercado para garantizar la vivienda como un derecho y limitar su uso como negocio: bajar el 50% de los alquileres, contratos indefinidos, recuperar para uso residencial los pisos vacíos, turísticos y de alquiler de temporada y gravar con altos impuestos a los rentistas que son multipropietarios de viviendas.

Paneque ha defendido las políticas del Govern para adquirir viviendas y que no pierdan protección social, al tiempo que ha reafirmado su apuesta por la inspección para vigilar los alquileres de temporada.

También en una entrevista en RAC-1, la portavoz del Sindicato de Inquilinos, Carme Arcarazo, ha criticado que la “única” política que propone el Govern sea “construir 50.000 pisos”. “Si proponemos un esfuerzo titánico como la huelga de alquileres es por culpa de la inacción de los gobiernos durante años”, ha apostillado.

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