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Más dólares: el dato clave para 2025 que anticipa el crecimiento del campo

Aunque diciembre recién inicia, todo indica que sin los avatares que produjo la última sequía, el año calendario cerrará con una interesante liquidación de exportaciones del sector agroindustrial a la administración de Javier Milei, que mira con atención tanto el aporte de reservas al Banco Central (BCRA) como a la Agencia de Recaudación (ARCA).

"Hay que ver cuánto más anotan los exportadores para embarcar, porque lo están haciendo muy sobre la fecha, pero si se cumple la molienda de soja que se proyecta, más lo que se cargue de trigo y cebada, que se está cosechando bien, el año debería terminar con unos u$s 25.000 millones liquidados, un 27% por arriba del año pasado", señaló Javier Preciado Patiño, consultor privado y ex subsecretario de Mercados de la Nación.  

Frente a una caída de 9% interanual en la industria, según el Índice de Producción Industrial de Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), con un 30% más de liquidación de divisas, el campo resultó un aliado del Gobierno para alcanzar superávit primario y financiero, por primera vez en 16 años, y apalanca un círculo virtuoso.

Por eso, el equipo técnico que lidera Luis Caputo en Economía, sigue de cerca las proyecciones de la agroindustria que, también fue central para fortalecer la recaudación fiscal. Entre enero y noviembre representó 4,6% del total, lo que se traduce en valor absoluto en unos u$s 6.000 millones y marca que en 2024 la participación crece 50% respecto al año anterior, explicó Preciado Patiño.

Los Derechos de Exportación (#retenciones) representan este año el 4,6% de la recaudación total de #ARCA Ene-Nov%uD83D%uDCB0%uD83D%uDCB0. En valor absoluto unos US$6.000 millones%uD83D%uDCB5. En 2024 la participación crece 50% respecto de 2023%uD83D%uDCC8. %uD83E%uDDF5 pic.twitter.com/XQM9Pu6MI5

— Javier Preciado Patiño (@jpreciadopatino) December 3, 2024

"La exportación agrícola es la gran aportante a la recaudación, y en especial el complejo soja que tributa un tercio de su valor FOB", agregó el especialista y destacó que en 2021 y 2022, con cosechas normalizadas y pico de precios de los granos, la participación de las retenciones llegó a ser el 9% del total.

Recuperación y repunte

La proyección se ajusta a la que realizan consultoras del sector privado que advierten que en el último trimestre del año el nivel de liquidación fue "atípico" en términos positivos por el flujo de exportaciones.  

Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) la recuperación productiva en la última campaña retribuyó al Estado u$s 5500 millones, tomando en cuenta soja, maíz, trigo, girasol, cebada y sorgo. 

Esta cifra representa un aumento del 80% interanual con relación a la recaudación obtenida en 2023, que fue de u$s 3.070 millones, por el impacto de la sequía. 

Además de la caída de precios internacionales, la dinámica comercial estuvo afectada por las declaraciones anticipadas de 2023 mientras que el anote de DJVE para la campaña próxima "estuvo bastante por debajo del promedio de los últimos años".

Según la entidad rosarina las toneladas exportadas de aceite de soja durante el décimo mes del año fueron las más importantes en 17 campañas. Así octubre se convirtió en el mes con más exportaciones de este producto que se despacha principalmente a India, en el ciclo, sólo por segunda vez en la historia.

En la misma sintonía, noviembre mantiene el vigor por los embarques de aceite, y según las estimaciones preliminares de la agencia marítima NABSA, el penúltimo mes del año debería terminar con poco más de 630.000 toneladas de aceite de soja embarcadas. De ser así, se convertiría en el segundo mejor mes de la campaña y el mayor volumen exportado de aceite de soja para un noviembre en catorce años.

Palanca para 2025

  Aunque las retenciones continúan en pie y permanecerán en 2025 según la información que el Gobierno volcó en la ley de Presupuesto, las mejores condiciones macroeconómicas impulsaron las exportaciones del sector primario y parecen sentar una base sólida para el 2025, cuando la Argentina se siente a negociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI) el pago de la deuda.  

"El superávit fiscal, un hito histórico, y la entrada de dólares de la mano del éxito del blanqueo, iniciaron un proceso de mejora en la confianza que se tradujo en mayores liquidaciones de los exportadores, compras netas del Banco Central e ingreso de fondos para inversión de cartera", explica José María Segura, economista Jefe de PwC Argentina.

En el último informe, la consultora destaca que se está gestando un "círculo virtuoso" para que la economía argentina haga la transición del corto plazo -con restricciones cambiarias, a un mediano/largo plazo, con perspectivas de mayores exportaciones y superávit comercial, sin que sea inexorable atravesar una corrección cambiaria.

Aunque la gestión liberal también pone la mira en sectores como el de energía, minería y litio para fortalecer las cuentas en el próximo ciclo, los números que anticipa la cosecha 2024/25 continúan a la cabeza. 

Bajo el esquema de alícuotas vigentes, en el segundo año de gestión de Milei, la BCR estima que la recaudación por DEX en el nuevo año alcance u$s 8165 millones, lo que refleja un alza de casi 50% respecto del monto recaudado en el año que cierra.

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