Una empresa internacional de servicios de rampa empezará a operar en los aeropuertos argentinos
La firma británica Menzies Aviation finalmente aterrizará en la Argentina en poco menos de dos meses. La compañía que ofrece servicios terrestres, de carga, de abastecimiento de combustible, servicios ejecutivos y servicios fuera de línea para la industria aeronáutica, se conformó como empresa en el país el pasado viernes y buscará iniciar su operación en los aeropuertos locales en no más de seis semanas.
Apta para gestionar, tanto vuelos locales, como internacionales, Menzies tiene presencia en más de 300 aeropuertos distribuidos en 65 países del mundo. En América del sur, opera únicamente en Colombia, Perú y Chile. En el país limítrofe es, además, uno de los mayores aliados de la aérea low cost JetSmart, ya que le presta servicio de aerohandling en más de 16 terminales.
Según información del diario La Nación, Menzies realizará la prestación del servicio en todos los aeródromos y aeropuertos de la Argentina, de manera que ya inició los procesos de obtención de licencias y permisos ante la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
Antes de eso deberá seguir el trámite normal para la conformación de una sociedad y lograr la habilitación por parte de la Inspección General de Justicia (IGJ) de la ciudad de Buenos Aires.
De esta manera, la firma actualmente presidida por Diego Ferrari, uno de los dos abogados locales que ayudaron al desembarco de la empresa en el país, buscará aliarse con la mayor operadora aeroportuaria local, propiedad del empresario Eduardo Eurnekian, Aeropuertos Argentina.
Ferrari es uno de los letrados que figura como accionista de la empresa británica -posee el 98% del capital social- en el documento que comunica la conformación de la compañía en el país que se publicó el viernes pasado en el Boletín Oficial. Sebastián Villa es el otro abogado, que hoy oficia como accionista, con el 2% del capital restante, lo que equivale a unas 600.000 acciones. Ambos profesionales pertenecen al estudio Cambiaso & Ferrari.
Aunque todavía no está definido el plan de negocios de la británica para la Argentina, la empresa es muy fuerte en el transporte de carga de alto valor y urgente, además del servicio de rampa. De hecho, cada año, manipula alrededor de 2,5 millones de toneladas de carga.
En el país, este negocio se centraliza en Ezeiza -llegan entre 400 y 500 toneladas de carga por semana- y cuenta con operadores internacionales como American Airlines, Avianca, Lufthansa, Latam y las empresas dedicadas exclusivamente a este negocio, como DHL, FedEx y UPS, entre otros.
El fin del monopolio de Intercargo
La semana pasada, además de la conformación de Menzies, el Gobierno habilitó a una empresa uruguaya para empezar a brindar servicios de asistencia en tierra para las aeronaves locales. Air Class Cargo iniciará sus operaciones en el aeropuerto internacional de Ezeiza y su habilitación tendrá una vigencia de 15 años.
El servicio de handling se compone de toda la asistencia en tierra a los aviones, lo que incluye las maniobras de push back, colocación de las escaleras para el embarque y desembarque de pasajeros, y la gestión de la carga y descarga de equipaje, entre otras funciones.
La posibilidad de sumar nuevos jugadores al mercado, anteriormente monopolizado por la estatal Intercargo, fue posible dada la desregulación que inició el año pasado, con el fin de implementar la política de cielos abiertos en el país.
En septiembre de 2024, el Gobierno sacó a la luz un decreto para habilitar a otras empresas a prestar servicios de asistencia en tierra. La intención fue quitarle privilegios a la empresa estatal que fue la firma preferente y exclusiva para la prestación de estos servicios, con excepción de aquellas aerolíneas (nacionales y extranjeras, como el caso de Flybondi y American Airlines) que hubieran optado por la autoprestación del servicio ante la autoridad de control.
La primera firma habilitada para brindar servicios de rampa fue la low cost Flybondi, que cuenta con su propia estructura desde 2018 y que recibió la autorización por parte de la ANAC para ofrecer el servicio a otras compañías el año pasado. Según pudo saber este medio, las intenciones de la aérea de bajo costo no serían ampliar ese negocio, al menos por ahora.