Juegan solos, pero no ganan solos. Celebraba el banquillo de Alcaraz el triunfo en París porque cada uno ha aportado su granito para que eso suceda. Que esto es una maquinaria y cada uno debe ajustar su pieza. En el caso de Alcaraz es un equipo que lleva muchos años juntos, han visto crecer al murciano en la pista y fuera de ella y hay ya, por tanto, una complicidad de la que se pueden entender con una sola mirada. A la cabeza, Juan Carlos Ferrero . Campeón de Roland Garros en 2003 y líder de la ATP durante ocho semanas... Читать дальше...