La Generalitat prevé un coste de 100 millones para la desaladora del puerto de Barcelona
La Generalitat adquirirá e instalará una desaladora flotante en el puerto de Barcelona para paliar la sequía.
Pese a que la Generalitat de Cataluña levantó el estado de emergencia en el sistema Ter Llobregat, pasando al estado de excepcionalidad, la región mantiene los planes para instalar una planta desaladora flotante en el puerto de Barcelona para paliar la sequía que sufre la región. David Mascort, consejero de Acción Climática, señaló que la desaladora del puerto tendrá un coste aproximado de 100 millones de euros. La planta se pondrá en marcha cuando se active el escenario de emergencia II, previsto para octubre.
- En un dato. Las cuencas internas de Cataluña se encuentran al 25,3% de su capacidad.
¿Qué infraestructura se necesita? Además de la desaladora principal, el Govern también establecerá 12 plantas portátiles a lo largo del norte de la Costa Brava, con un coste de alrededor de 10 millones de euros. Se espera que estas plantas estén operativas a partir de junio y que cubran el 35% de la demanda de 13 municipios.
La desaladora de Barcelona será la primera planta flotante de España
La desaladora que se instalará en el puerto de Barcelona aportará a la red 40.000 metros cúbicos de agua al día, el 6% del consumo de la ciudad. Esta solución sustituye a la anterior propuesta de enviar barcos cisterna desde la Comunidad Valenciana. Según la Generalitat, la desaladora aportará un 50% más de agua con un 40% menos de coste.
Cataluña ya cuenta con dos grandes desaladoras, la de La Tordera en Gerona y la de El Prat en Barcelona, con una capacidad de 257.600 metros cúbicos al día entre ambas, según datos de la Asociación Española de Desalación y Reutilización (AEDyR).
Domingo Zarzo, presidente de la AEDyR, advierte que no existen en España desaladoras flotantes como la que se va a instalar en Barcelona. Para Zarzo, la solución de ubicarla en el puerto facilita el proceso: “El agua se vierte directamente al depósito, y también limita el impacto ambiental porque el puerto ya es una zona degradada”, explica.
El contrato de compra de la desaladora del puerto de Barcelona se ha firmado por cinco años, tras los cuales se renovará si sigue siendo necesaria, y en caso contrario se venderá.
Fuentes
Generalitat de Cataluña
Fundación Aquae
Domingo Zarzo, presidente de la Asociación Española de Desalación y Reutilización