Fracasa la moción para sustituir al presidente surcoreano por el boicot de su partido en la votación

La moción de censura para destituir al presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, ha fracasado este sábado debido al boicot del gobernante Partido del Poder Popular, que debía ceder al menos ocho votos a la oposición para que el proceso siguiera adelante. La iniciativa, cuyo desencadenante fue la ley marcial declarada el pasado martes por el presidente surcoreano, ha sido apoyada por 195 diputados de un total de 300 que conforman la Asamblea Nacional.

• La oposición necesitaba al menos 200 votos, dos tercios de la cámara, para que la moción de censura saliera adelante, ha informado la agencia Yonhap.

La crisis continúa. Pese a haber perdido la votación, los grupos de la oposición seguirán intentando que Yoon Suk-yeol abandone la presidencia surcoreana, según The New York Times. El diario estadounidense cree que la crisis política desencadenada «prolonga la incertidumbre en el liderazgo de uno de los aliados más importantes de Estados Unidos».

La jornada no ha estado exenta de polémica, después de que los diputados del partido de Yoon Suk-yeol abandonaran el hemiciclo. Los manifestantes que se habían congregado alrededor de la Asamblea Nacional pidieron a los parlamentarios del Partido del Poder Popular que regresaran y participaran en la votación de la destitución del presidente, recoge el diario estadounidense.

Contexto. La destitución se ha debatido en la cámara surcoreana después de que el presidente aplicara el pasado martes la ley marcial, un hecho insólito en las casi cuatro décadas de democracia parlamentaria.

• El Partido Democrático, principal partido de la oposición, exigió la dimisión inmediata del presidente surcoreano el pasado miércoles. Tras mantenerse en el cargo, todos los partidos de la oposición anunciaron la presentación de una moción de censura, que finalmente ha fracasado.

• Yoon, del Partido del Poder Popular, justificó la decisión, posteriormente revocada, con el fin de «proteger la democracia liberal y la seguridad pública de las amenazas de subversión dentro de la República de Corea».

Yoon se enfrenta a una crisis interna. Han Dong-hoon, jefe del Partido del Poder Popular en la oposición, exigió la «inmediata suspensión del presidente de sus funciones con vistas a proteger a la República de Corea y a su pueblo». Este sábado ha vuelto a reiterar que la dimisión de Yoon «es inevitable» y que el partido debatirá sobre cuál es la mejor forma de proceder antes de la votación.

• El presidente surcoreano, por su lado, ha pedido disculpas por haber aplicado la ley marcial y ha afirmado que dejará en manos de su partido su poder.

Fuentes

Agencia de noticias Yonhap

The New York Times