Tres incendios forestales en Los Ángeles (California) obligan a evacuar a 30.000 personas
Tres incendios forestales en Los Ángeles (California, Estados Unidos) están “arrasando” varias zonas del territorio tras haberse propagado rápidamente desde la madrugada del martes, obligando a evacuar a más de 30.000 personas, informa Associated Press.
- Se espera que la situación empeore durante las próximas horas, ya que se prevén vientos de 160 km/h en zonas en las que no ha llovido en meses.
- Según medios de EEUU, miles de personas huyen a pie, mientras que están teniendo que ser atendidas por quemaduras. Más de 1.400 bomberos trabajan para intentar mitigar las llamas.
- El gobernador de California, Gavin Newsom, ha declarado el estado de emergencia. El presidente de EEUU, Joe Biden, ha ofrecido ayuda federal.
Uno de los incendios afecta al barrio de Pacific Palisades, una zona de playa conocida por ser un enclave al que acuden las celebridades del país, donde alrededor de 30.000 residentes están bajo órdenes de evacuación y más de 13.000 estructuras están bajo amenaza.
- Hay al menos 1.182 hectáreas quemadas en esta zona, además de muchas casas y comercios destruidos, informa Reuters.
- La rápida propagación del fuego ha derivado en grandes atascos en las carreteras, dificultando el paso de los vehículos de emergencias. Muchas personas están abandonando sus coches y huyendo a pie.
Un segundo incendio se originó cerca de una reserva natural al noreste de Los Ángeles y cerca de Pasadena, a 50 kilómetros al interior. Un fuerte viento de alrededor de 100 km/h está haciendo que se propague con mucha rapidez. Ha duplicado su tamaño en pocas horas.
- Unos 100 residentes de una residencia de ancianos han tenido que ser evacuados.
- Por el momento hay 162 hectáreas afectadas y miles de edificios destruidos.
El tercer incendio forestal también comenzó en la noche del martes y rápidamente provocó evacuaciones en Sylmar, una comunidad al norte de Los Ángeles. Se está extendiendo hacia Malibú.
El origen de los tres incendios está bajo investigación, aunque el Servicio Meteorológico Nacional ya había alertado de que las condiciones por el viento eran extremas antes de que se produjesen.