El día que drogaron a Britney Spears en una fiesta de Sean 'Diddy' Combs y nadie creyó su versión
Britney Spears se encuentra inmersa en nuevos proyectos. A través de su cuenta de Instagram, la artista ha anunciado que está escribiendo una novela, momento en el que también ha aprovechado para mencionar a mujeres del panorama famosil a las que quiere y admira.
"Mujeres a las que realmente admiro, ¡me gustan las chicas locas", así comienza la última historia que ha publicado Britney en Instagram. La intérprete de Baby one more time afirma que "cuando creces, tu otra mitad suele ser tu mejor amiga. Como siempre están juntas, sus gestos, la forma en que hablan e incluso caminan es casi como si fueran las mismas personas. Pasan los años y se casan y crecen y empiezan a vivir en mundos separados. Se llama vida. Tengo "novias" con las que salgo de vez en cuando, pero no es lo mismo que cuando éramos más jóvenes. Pero ¿por qué no lo es? Quería compartir las mujeres que me inspiran".
Las mujeres que inspiran a la cantante
La cantante ha mencionado a actrices y cantantes que le han servido de inspiración en su novela. Entre ellas destacan Pamela Anderson, a quien considera una mujer muy divertida, Natalie Portman, una de las mejores personas que ha conocido o Camilla Cabello: "Es tan bonita, me hace reír en voz alta. Su personalidad es tan dulce y excéntrica, ¡ojalá fuera como ella! Y como Kendall Jenner, ¿es normal que sea tan guapa? Las otras dos son Selena Gomez y Drew Barrymore, ¡son literalmente preciosas!"
Nadie creyó a Britney Spears
La última publicación de Britney hablando de sus mujeres favoritas, coincide con uno de los momentos más complicados de su vida y que, casualmente, los medios están sacando a la luz de nuevo por el caso Sean 'Diddy' Combs, en el que están implicados numerosos famosos.
El productor musical fue detenido el 16 de septiembre por agentes federales en un hotel de Manhattan. ¿Las principales acusaciones? "Conspiración para cometer delitos organizados y tráfico de mujeres". Esta es la denuncia que enfrenta, además de una inminente demanda colectiva de más de 120 personas por abuso y agresiones sexuales, según informó el abogado Tony Buzbee.
Su bufete, en alianza con AVA Law Group, conocido por su participación en casos masivos de abusos en Estados Unidos, busca también exponer a los "socios y cómplices" de Combs. Y en medio de este escándalo mediático, Britney Spears ha sido mencionada como una figura clave. Al igual que otras celebridades, la cantante compartió noches de fiesta con 'Diddy' en la etapa más turbia de su vida. Muchos señalan que pudo haber sido "influenciada" por el rapero, lo que pudo haber contribuido a su caída pública.
En 2007, un año decisivo en la carrera de Spears, ocurrió un famoso episodio durante la celebración del cumpleaños de Cassie Ventura, quien era pareja de Sean Combs en ese momento. Aquella noche, tuvieron que sacar a Britney en brazos de la mansión y la prensa asumió que se debía a sus problemas con el alcohol.
Ya recuperada, Britney aseguró que alguien había alterado su bebida, pero nadie creyó su versión y la tacharon de "loca" y "adicta". Entre los asistentes a la fiesta estaban Dallas Austin, Paris Hilton y, por supuesto, Diddy. Y teniendo en cuenta que las salidas nocturnas de Spears con figuras como Paris Hilton y Lindsay Lohan eran comunes, no se le dio crédito a su versión. Su vida parecía estar fuera de control y lo que decía parecía no importarle a nadie.
2007, un año marcado por la desgracia
La frase "si Britney superó el 2007, tú puedes superar cualquier cosa", es tan real como la vida misma. Ese año tuvo lugar la desastrosa presentación de Spears en los MTV Video Music Awards con aquel bikini negro imposible de olvidar. En sus memorias, la artista detalla lo que vivió ese día: "Hacía mucho que no veía a Justin Timberlake. Él estaba en la cima de su carrera, lleno de arrogancia. Yo, por otro lado, estaba teniendo un ataque de pánico. No había ensayado lo suficiente. Odiaba mi aspecto. Sabía que todo iba a salir mal".
Criticada por su peso y falta de coordinación, su actuación fue blanco de burlas y comentarios maliciosos. Se la acusó de cantar mal, hacer mal playback e incluso estar bajo los efectos del alcohol. Todo esto se agravó cuando, el 15 de febrero, Britney ingresó en un centro de rehabilitación, aunque solo permaneció allí 24 horas. Pocos días después, se rapó la cabeza. La prensa y el público ya habían emitido un juicio condenatorio hacia ella. Además, en octubre de ese año, perdió la custodia de sus hijos.