Una polémica frase de Rita Maestre en 'Salvados' pone en duda su versión
Rita Maestre ha dado la cara tras la denuncia de Elisa Mouliáa a Íñigo Errejón por agresión sexual. Según la actriz, ya son 15 mujeres las que planean sumarse a la denuncia, recaudando fondos para llevar a juicio al político. La exnovia de Errejón, Rita Maestre, ha hablado con Gonzo en Salvados sobre cómo afrontó la noticia, dejando claro que no tenía ni idea de las pésimas actitudes de Íñigo con las mujeres.
"En la esfera política, el feminismo ha cambiado tanto las cosas que, desde que en una publicación anónima acusan a un político en primera línea de comportamientos, que ni siquiera sé si son delictivos, pero que hablan de relaciones de maltrato, abuso psicológico e incompatibles con una buena persona y un dirigente de izquierdas, hasta que esa persona abandona su cargo, no pasa ni una semana", expresa la política de Más Madrid, recordando que, desde su relación con Errejón ha pasado más de una década. Por lo tanto, asegura que no tenía conocimiento de los delitos que se le acusan.
"Errejón es un misóino, deprededador y manipulador"
"Esa parte es más sencilla, la personal te obliga a remirar en tu pasado", afirma Maestre, recordando la carta que escribió tras la dimisión de su exnovio en la que le llamaba "misógino". Rita sigue sin entender cómo ha pasado tanto tiempo de su vida "con una persona de la que no conocía la otra cara (...) Por supuesto, que ni yo, ni las personas de las que puedo hablar que son Manuela o Mónica, las dirigentes de Más Madrid, sabíamos que era un misógino, un depredador y un manipulador".
La política insiste en que jamás encubriría algo así, por mucho que quisiese a su expareja en el pasado y reflexiona: "Cómo iba a encubrir yo como política, lo que no supe como pareja. Si fuera verdad, revelaría que somos todos unos psicópatas y, como no es cierto, hay que poner los puntos sobre las 'íes'".
La carta de Rita Maestre
"No hay que dejar que el foco de las acciones tóxicas de una persona se acabe convirtiendo en una mancha que culpa a todas las personas de su entorno o a las que le han votado, eso no es justo", concluía Rita, antes de seguir abordando el tema de su carta, en la que quiso explicar "cómo pueden convivir en algunas personas una apariencia de bondad y normalidad con comportamientos oscuros que están tapados y que conviven en el mismo día y en la misma hora".
Sorprendida y muy decepcionada con el rumbo que ha tomado la vida de su ex, la política afirma que todo esto "es impactante, pero es cierto y hay que nombrarlo porque si no es muy fácil pensar que un manipulador o maltratador es una especie de monstruo que lleva cuernos y cola y está escondido en un portal, cuando la realidad es que la violencia sexual se produce en los entornos sociales de confianza".
Rita nunca supo nada
Maestre insiste en que se enteró de todo como la mayoría de españoles, a través de las denuncias en la cuenta de Instagram de Cristina Fallarás: "Me despierto el sábado y leo un testimonio de una mujer que cuenta que ha tenido una relación con una persona que, entonces, era mi pareja y que fue una relación turbia de maltrato psicológico, abuso y que se ha sentido vejada".
Como era de esperar, en ese momento, Rita se dio cuenta de que la presunta víctima estaba hablando de una persona que había compartido la vida con ella: "Es importante para mí decir que en esa situación no estoy con quien era mi pareja sino con la mujer que le ha acusado de eso. No tengo una rivalidad con esa mujer sino un profundo desprecio por ese hombre que nos ha tratado mal a las dos. Yo no tengo por qué avergonzarme de ello".
Tras descubrirse el pastel, la concejala del Ayuntamiento de Madrid habló con Mónica García y ambas descubren que Errejón no niega los hechos, es más, asegura que "es posible". "Él no niega haber tenido ese tipo de comportamientos. Reconoció los hechos a la primera". En ese momento y conscientes de lo que se les venía encima, le pidieron a Íñigo que presentara su acta de dimisión de forma inmediata. Rita también destaca que su ex "no reconoció un hecho concreto" pero confirmó que "había tenido actitudes machistas como las descritas en ese hilo".
Feminismo para todas o para unas pocas
"Ojalá lo hubiéramos sabido antes". Con esa frase, Maestre lamenta no haber estado al tanto de la situación. La contradicción llega cuando Gonzo le recuerda que tuvieron la oportunidad de verlo antes cuando una mujer de Castellón denunció al político en junio de 2023. La mujer en cuestión, denunció en la red social X (antes Twitter), que aquel sábado 17 de junio vivió "una situación muy incómoda con Íñigo Errejón que se podría clasificar como agresión sexista".
La presunta víctima explicó que "noté una mano en la cintura y sabía que solo podía ser suya, pero en un primer momento pensé que simplemente quería pasar o algo por el estilo". Fue su amiga quien apartó la mano del político de un manotazo. La denunciante señaló también que se le pidió que no llevara a cabo un "escarnio público" y concluyó lamentando que Errejón, presuntamente, le "metió mano en un bar".
Gonzo quiso hacer hincapié en esta denuncia, preguntando por qué se le dio credibilidad a la denuncia realizada en la cuenta de Fallarás y no a la de la mujer de Castellón. "El ámbito era una fiesta donde los comportamientos pueden ser más ambiguos y existir percepciones distintas. En el post de Cristina Fallarás se hablaba de comportamientos continuados de humillación", se justificó Maestre, enfureciendo a un sector de la población que no está de acuerdo con sus polémicas palabras.
"No" siempre es "no", da igual el dónde
"Maestre está abriendo una puerta muy peligrosa, porque entonces, el 'sola y borracha quiero llegar a casa' se os va por el retrete", escribía un usuario en X, poniendo de manifiesto el peligro de afirmar que por estar en una fiesta, los comportamientos de víctima y victimario pueden dar lugar a percepciones distintas.
"Queda claro escuchando a Rita Maestre que le restaron importancia a la denuncia de la chica en el festival de Castellón y queda claro a quien creyeron en ese momento: a Íñigo Errejón", dice otra usuaria, muy decepcionada con las declaraciones de la política.
Maestre vuelve a justificarse señalando que en el caso de Castellón, "no existía la posibilidad de hablar con la persona afectada porque dijo que no quería hablar ni quería poner en marcha el protocolo antiacoso. No quería saber nada más de este tema y el otro testimonio que teníamos es que se trataba de un ligoteo".
Pese a las contradicciones en el relato de la política, es importante destacar su implicación en el caso, pues es de las pocas que ha aceptado ponerse delante de una cámara. Solo ella sabe realmente quién podía sospechar algo y quién no tenía ni idea. Solo ella tiene el poder de su verdad y solo ella, como política, puede plantear nuevas soluciones para acabar con la lacra del machismo en nuestra sociedad. Que lo haga o no, solo depende de ella, de sus compañeras de partido y de las instituciones.