El jardín de las delicias, ese oscuro objeto
En "El jardín de las delicias" Rigel Herrera confronta erotismo y hábitos de consumo. "Yo seré tu espejo no significa yo seré tu reflejo, sino yo seré tu ilusión", dice la sentencia alrededor de la cual pintó mujeres sin rostro que vistas de cerca crean el efecto distorsionado de un espejo.