La Guardia Civil se unirá a la lucha contra el ISIS en Irak si Rajoy es presidente

El despliegue de 30 guardias civiles en Irak está aprobado desde el pasado otoño. Se trata de una de las medidas de respuesta con las que España respondía a los atentados terroristas de Paris en noviembre. Sin embargo, la ausencia de gobierno ha supuesto la paralización sine die de la misión.

Durante todos estos meses, los agentes del Grupo de Acción Rápida (GAR), que serán responsables de la misión de formación, han estado entrenándose en diversas situaciones relacionadas con riesgos terroristas de origen islamista. El grupo, que fue determinante durante décadas en la lucha contra ETA, ha centrado su objetivo en este nuevo tipo de amenaza.

Su misión en Irak será la instrucción de equipos de operaciones especiales de la policía federal iraquí, una unidad similar al GAR en cuanto a misiones antiterroristas –tanto en ambientes rurales como en zonas urbanas- y en cuanto a su carácter militar.

En teoría, la misión debió comenzar en el primer semestre de 2016, pero la inestabilidad política y la ausencia de Gobierno han provocado su congelación. Sin embargo, fuentes internas de la Dirección General de la Guardia Civil confirman que “está todo listo” para dar luz verde a la misión en caso de que el PP revalide una nueva legislatura.

En caso contrario, las dudas sobre la misión deberían ser despejadas por el nuevo gobierno, que será quien debe tomar la decisión tras someterlo a aprobación en el Congreso.

Fuentes políticas próximas al gobierno en funciones aseguran que este tipo de despliegues no requerirán mucho debate parlamentario, sobre todo entre las formaciones que firmaron el pacto de respuesta al yihadismo el pasado otoño.