Disney pierde la inocencia pero gana un taquillazo con 'Deadpool y Lobezno'
Era el superhéroe que no merecía una película y, de repente, es el que el mundo necesita. Alguien sin responsabilidad a pesar de tener un gran poder, capaz de burlarse de lo prohibido, de llamar a las cosas por su nombre, de romper, con la cuarta pared, la timorata fachada de Disney a base de bromas escatológicas, violencia explícita y hasta necrofilia. Reconvertido en el mesías de Marvel, es Deadpool, deformado, malhablado, soez, gamberro y, para colmo, inmortal, el encargado de resucitar un universo tan exprimido que parecía agotado. Читать дальше...