Un gel por vía oral que podría acabar con la resaca
Un grupo de científicos ha desarrollado un hidrogel que quiere ser el remedio para los síntomas de la resaca. La solución se ha probado con éxito en ratones. Los resultados de este trabajo , elaborados por la Escuela Politécnica Federal (ETH) de Zúrich, la Universidad de Agricultura de China, la Universidad Zhejiang Shuren, el Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona (ICFO) y la Universidad belga de Ghent, han sido publicado en 'Nature Nanotechnology'. «En los roedores el gel convierte el alcohol de forma rápida, eficaz y directa en ácido acético inofensivo antes de entrar en el torrente sanguíneo, donde normalmente desarrollaría sus efectos intoxicantes y nocivos», describe ICFO en un comunicado. Su administración es por vía oral , y los investigadores destacan que este gel podría tener el potencial de convertirse en un antídoto eficaz frente a una intoxicación por alcohol. ICFO también describe que la mayor parte del alcohol ingresa al torrente sanguíneo a través de la membrana mucosa del estómago y los intestinos. «Hoy en día, las consecuencias de esto son indiscutibles: incluso pequeñas cantidades de alcohol perjudican la capacidad de concentración y reacción de las personas, aumentando el riesgo de accidentes. Beber grandes cantidades de forma regular es perjudicial para la salud: entre las consecuencias más comunes se incluyen enfermedades hepáticas, inflamación del tracto gastrointestinal y cáncer», afirman. En medio de este panorama, los autores indican que este gel podría ser una opción en terapias que tratan el alcoholismo. «Las terapias existentes se basan principalmente en enzimas endógenas y ofrecen sólo un alivio temporal de los síntomas , como las náuseas y los dolores de cabeza, pero no abordan otros problemas subyacentes, como la somnolencia, el agotamiento y el alcoholismo crónico», detallan. Este proyecto está pendiente de que se apruebe su experimentación en humanos. Tal y como ha llegado a explicar a ABC Javier Morallón, profesor de biología y experto en tecnología alimentaria y nutrición, el alcohol es, fundamentalmente, una sustancia tóxica que nuestro cuerpo debe de eliminar a la mayor brevedad posible . Y de este trabajo se encarga nuestra gran central química, el hígado. «Para desarrollar esta labor nuestro órgano desarrolla una ruta metabólica con dos enzimas fundamentales, por un lado, está la Alcohol Deshidrogenasa, que transforma el alcohol en un compuesto llamado acetaldehído, y por el otro la Aldehído Deshidrogenasa, que termina por descomponerlo en acetato y, a continuación, convertirlo en dióxido de carbono y agua« Y añade que el acetaldehído es el malo de esta historia , es más tóxico que el propio alcohol etílico y debe ser rápidamente degradado. Provoca dolor de cabeza, boca seca, náuseas, enrojecimiento facial y elevación de la temperatura de la piel, entre otros síntomas. « El corazón tampoco permanece ajeno a la fiesta y nos suele regalar alguna aceleración del ritmo cardíaco con hipertensión de propina», matiza Morallón. Además, con la edad , Morallón señala que las enzimas también envejecen y su eficacia metabólica empieza a dejar que desear por lo que sustancias como el acetaldehído van a permanecer más tiempo activo , actuando de forma perniciosa. «Durante la resaca nuestro cuerpo busca agua desesperadamente, mientras somos jóvenes el agua no es difícil de encontrar en nuestros tejidos, pero conforme cumplimos años la deshidratación es creciente. Además, nuestra proporción de grasa corporal suele hacer justo lo contrario, como la grasa no absorbe el alcohol a mayor proporción tendremos menos capacidad para diluirlo», indica. Frente a esta fotografía de efectos, el gel lo que hace es alterar los mecanismos naturales de degradación del etanol. «El gel desplaza la descomposición del alcohol del hígado al tubo digestivo. A diferencia de lo que ocurre cuando el alcohol se metaboliza en el hígado, no se produce acetaldehído nocivo como producto intermedio», explica el científico de materiales Raffaele Mezzenga, de la ETH de Zúrich. También se describe que en el futuro, el gel podría tomarse por vía oral antes o durante el consumo de alcohol para evitar que aumenten los niveles de alcohol en sangre y que el acetaldehído dañe el organismo. «Sin embargo, el gel sólo es eficaz mientras haya alcohol en el tracto gastrointestinal ». afirman. Y matizan que este gel puede hacer muy poco para ayudar con la intoxicación por alcohol una vez que haya pasado al torrente sanguíneo. Tampoco ayuda a reducir el consumo de alcohol, en general. «Es más saludable no beber alcohol en absoluto. Sin embargo, el gel podría ser de especial interés para las personas que no quieren dejar el alcohol por completo, pero tampoco quieren ejercer presión sobre su cuerpo y no buscan activamente los efectos del alcohol », dice Mezzenga. Los científicos querían imitar la enzima natural peroxidasa de rábano picante (HRP), que es la responsable de descomponer el alcohol en el organismo. Y para la elaboración del gel emplearon una proteína de suero de leche abundante, beta-lactoglobulina , que se encuentra por ejemplo en el suero de la leche de vaca y de otras especies de rumiantes. «Estas proteínas las hirvieron durante varias horas para formar fibrillas largas y delgadas . Agregar sal y agua como solvente hace que las fibrillas se entrecrucen y formen un gel. La ventaja de un gel sobre otros sistemas de administración es que se digiere muy lentamente«, explica ICFO. A continuación, para descomponer el alcohol, el gel necesita varios catalizadores . Los investigadores utilizaron átomos de hierro individuales como acelerador principal, que distribuyeron uniformemente sobre la superficie de las largas fibrillas de proteína. «Hemos sumergido las fibrillas en un baño de hierro, por así decirlo, para que puedan reaccionar eficazmente con el alcohol y convertirlo en ácido acético », describe Jiaqi Su, primer autor del estudio. Y para desencadenar esta reacción en el intestino se generó también una reacción previa entre glucosa y nanopartículas de oro . Y como describen desde ICFO, se empaquetaron todas estas sustancias (hierro, glucosa y oro) en el gel. El hidrogel fabricado con la enzima artificial fue suministrado a un grupo de ratones a los que se les había dado alcohol previamente. De forma efectiva redujo los niveles de alcohol en sangre, un 40% tras pasar treinta minutos. Y al 56%, a las cinco horas. Asimismo, evita la acumulación de acetaldehído y proporciona protección a ciertos órganos. «Nuestro hidrogel demuestra un efecto protector sobre el hígado y, al mismo tiempo, mitiga el daño intestinal y la disbiosis - que se caracteriza por la alteración de la flora intestinal- asociada con el consumo crónico de alcohol, lo que introduce una estrategia prometedora en la desintoxicación eficaz de la substancia», describen los autores de la investigación. Los científicos afirman en su estudio que la construcción de antídotos eficaces para reducir los impactos en la salud global inducidos por el alcohol es un tema desafiante . «A pesar de los efectos positivos observados con las aplicaciones intravenosas, sus actividades insuficientes y su uso complicado a menudo resultan en la acumulación de acetaldehído tóxico. Esto plantea importantes preocupaciones clínicas, destacando la necesidad apremiante de estrategias orales», establecen. En ese sentido cabe destacar que la OMS señala que cada año se registran 3 millones de muertes relacionadas al consumo de alcohol , lo que representa un 5,3% de todas las defunciones. Y el 13,5% del total de fallecimientos de personas de entre 20 a 39 años de edad son debidas al consumo de alcohol. Minimizar los efectos nocivos de la intoxicación etílica tanto a corto como a largo plazo sería un gran paso, y este tipo de proyectos intentan avanzar en ese camino. Por eso, se sigue investigando para sacar partido a todas las potencialidades que puede aportar una solución de este tipo.