Los trabajadores de Bimbo arrancan entre «incertidumbre» sus jornadas de huelga contra el cierre de la planta en Valladolid
Con la «incertidumbre» por lo que será su futuro laboral pendiendo sobre sus cabezas, con el turno de noche de este miércoles 9 a jueves 10 de octubre, los trabajadores de Bimbo en Valladolid han arrancado la ronda de jornadas de huelga programadas contra el cierre de la planta en el polígono de San Cristóbal. Por delante, supeditados al avance de las negociaciones con la multinacional, otros ocho días marcados en el calendario para parar la actividad como medida de protesta contra los planes de la empresa, que no se apea de su decisión de cerrar la histórica planta vallisoletana en un horizonte tan perentorio como entre finales de 2024 y febrero de 2025. Los días 16, 17, 20, 21, 22, 23, 24 y 25 de octubre son las otras jornadas marcadas en rojo de huelga en Bimbo Valladolid, coincidiendo con el mes de negociación del ERE (Expediente de Regulación de Empleo) registrado ya la semana pasada en la Oficina Territorial de Trabajo de Valladolid por parte de la multinacional. Mientras, en esas negociaciones, la ronda de contactos entre el Comité de Empresa y los responsables de la firma se ha levantado este miércoles de la mesa sin más avances que lo apuntado el día anterior, en el que Bimbo mostró su disposición a un plan de reindustrialización para la fábrica en la que ya no quieren sacar más Donuts, Donettes, Tigretón o Bollycao. Así, el presidente del Comité de Empresa de Bimbo en Valladolid, Félix Fernández, ha lamentado que la compañía no haya dado detalles de ese plan de reindustrialización más allá de la confirmación de su contratación con la firma LHH para estos trabajos. Además, ha cuestionado que mantenga la «incertidumbre» sobre el plan social que plantea para los trabajadores de una factoría con 166 empleos directos y unos 40 más a través de subcontratas. Sin cifras, ha censurado, ni más detalles sobre las posibles prejubilaciones, traslados, indemnizaciones... Los trabajadores inciden en la «viabilidad» de la factoría y critican que la firma siga «empeñada» que en sus planes de futuro pasan por el cierre.