La sorprendente pedida de mano en el globo de Isla Mágica a más de 100 metros de altura
El amor como lo conocemos está por todas partes: en películas, series y en casi todo lo que compone el mundo que nos rodea. Con el paso del tiempo y la evolución en la forma de pensar, l os tipos de amor han ido cambiando , alejándose en ocasiones del clásico amor romántico que siempre acaparaba todas las miradas. Este cambio suele ser positivo, porque si algo tiene que envolver al amor es la evolución, la tolerancia y la libertad para ejercerlo, siempre desde una actitud responsable con el otro. Sin embargo, y aunque la idea del amor de pareja haya podido cambiar, hay algo que sigue siendo igual: a todos los enamorados les obsesiona cómo será su pedida de matrimonio . Y no es para menos. Antes los clichés eran la mejor opción para declarar tu amor por la otra persona, pero ahora, con tantas pedidas de mano diferentes, la mayoría grabadas y públicas, cada vez el nivel está más alto . Por eso, muchos de los que están pensando en hincar rodilla, no saben con qué tipo de pedida acertarán. Este no fue el caso de Sergio y Elena , una pareja que celebró su amor por todo lo alto en el globo aeroestático de la atracción Nao Vigía en Isla Mágica . Ha sido el propio parque de atracciones el que ha subido el vídeo de ese momento tan especial a sus redes sociales, acompañado de un texto para felicitar a la pareja: «Ha dicho que si! Hoy ha sido un día muy especial en Isla Mágica y en Nao Vigía, convirtiéndose en el escenario perfecto para celebrar el amor de Sergio y Elena, que la ha sorprendido con una pedida inolvidable . Enhorabuena! ¡Os deseamos lo mejor!», escribían desde Isla Mágica. En el vídeo se puede ver cómo ambos disfrutaron de una elevación en el globo para los dos solos a 150 metros de altura , acompañados por un cuarteto de música conocido como 'Isbilya Quartet', que está formado por estudiantes del Conservatorio Superior de Sevilla. Con la música de los violines como único testigo, Sergio no dudó ni un segundo y se arrodilló ante Elena con el anillo en la mano, para pedirle que se case con él. Con esas vistas de la capital hispalense y la emoción del momento ella tampoco dudó y ¡le dijo que sí!. Una aventura en globo que ninguno de los dos olvidarán pase el tiempo que pase, porque a veces, no hace falta irse a otros lugares para hacerlo más especial, c uando tienes a Sevilla en la palma de tu mano. Lo más importante, al final, sigue siendo que cada pareja transforme ese momento en algo suyo.