Tras la celebración de las elecciones el 28 de julio, Edmundo González quiso desaparecer. Era consciente de que su seguridad no estaba garantizada y tampoco la de su familia. El mejor destino fue la embajada de Países Bajos en Caracas, donde el embajador Robert Schuddeboom , según las fuentes consultadas, le ofreció todo tipo de facilidades, aunque algunas restricciones en materia de comunicaciones. Al parecer, y como es lógico, no quería que el régimen de Nicolás Maduro estuviera al tanto y la prueba es que no informó a las autoridades. Читать дальше...