Para bastante gente, sobre todo la que ya ha rebasado la esquina de los cincuenta y en consecuencia está en la cara B de su vida –o le ha dado la vuelta al jamón, como prefieren decir otros- el mejor plan para pasar la Nochevieja es cenar con familiares, comerse las uvas, brindar, tomarse una copichuela viendo algo en la tele y constatar, casi con satisfacción, que los ojos se le empiezan a cerrar cuando el reloj apenas ha rebasado la una de la madrugada . El nuevo año es aún muy joven, piensa, y ya habrá tiempo para disfrutarlo. Читать дальше...