La mujer de un futbolista estrella su Ferrari en Neptuno y duplica la tasa de alcohol
No es la primera vez que el Paseo del Prado de la capital de España se convierte en el lugar de un accidente de coches de futbolistas o allegados. Es una parte del centro del Madrid donde se puede coger velocidad y luego se pagan las consecuencias. Esta vez le ha sucedido a la mujer del jugador de fútbol Dyego Sousa, que forma parte del Alcorcón, equipo que está jugando en Segunda. Sousa estuvo jugando en el Almería el curso pasado, hizo cinco goles y logró el ascenso a Primera, pero no continuó en el club.
No es la primera vez que el nombre del jugador está envuelto en un suceso relacionado con la conducción. Hace unos meses, el futbolisa se grabó a sí mismo conduciendo a una velocidad de 188 km/h y como le pareció que era poco infringir la ley de esa forma, lo subió a Instagram para hacerlo público.
Ahora, según informa El Mundo, su esposa brasileña de 40 años estrelló anoche un Ferrari Portofino, registrado a nombre del futbolista mientras estaba ebria, chocando contra unas vallas en el Paseo del Prado. Tras el accidente, el jugador apareció en un Mercedes para intentar ayudar.
Según la información, la pareja del futbolista dio positivo en el control de alcoholemia, con resultados de 0,50 y 0,51 mg/l en aire respirado, lo que duplica la tasa permitida y parece ser que se negó a realizar la prueba en sangre de contraste.
El asunto no acabó ahí. Según parece la Policía Municipal de Madrid evitó que un amigo que la acompañaba en el automóvil, se hiciera pasar como el conductor durante el accidente, para así evitar que la mujer cargase con la pena por conducir ebria.
Sin embargo, las cámaras del Banco de España, junto con la ayuda de la Guardia Civil, confirmaron que la esposa de Dyego Sousa estaba al volante. El Ferrari Portofino resultó totalmente destrozado tras el choque contra las vallas metálicas, dando un giro de 180 grados y quedando en medio de la carretera. A pesar de la gravedad del estado del vehículo después del incidente, ninguno de los dos ocupantes resultó herido. Según algunas valoraciones un coche así vale entre 215.000 y 250.000 euros.