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Trucos para cruzar un badén sin dañar la suspensión de tu coche

Trucos para cruzar un badén sin dañar la suspensión de tu coche

Conducir sobre un badén puede ser una verdadera prueba para la suspensión de tu coche. 

En España es habitual ver, en las diferentes carreteras, bandenes ligeramente elevados. Su objetivo es sencillo, que los coches se vean obligados a reducir su velocidad antes de llegar al paso de peatones y así evitar los accidentes de tráfico. Si bien cumplen un objetivo importante, lo cierto es que un mal manejo al atravesar estos obstáculos puede causar daños significativos, desde la suspensión hasta los neumáticos.

Los componentes de la suspensión son los más afectados al atravesar badenes a alta velocidad o de manera incorrecta. Los amortiguadores y resortes pueden sufrir una reducción en su capacidad para absorber impactos. Además, las rótulas y los bujes, que son partes móviles esenciales para la suspensión, pueden desgastarse prematuramente

Tipos de bandenes

El Ministerio de transporte informa sobre dos tipos de badenes reductores de velocidad: el más visto es el paso peatonal elevado (Sección Transversal Trapezoidal). Este badén mide aproximadamente cuatro metros de largo y su zona central está elevada unos 10 centímetros. Debe contar con dos rampas, cada una de las cuales no debe exceder el metro de longitud.

En segundo lugar esta el conocido como lomo de Asno (Sección Transversal). Este tipo de badén está fabricado con un plástico muy resistente y no se utiliza como paso peatonal, sino exclusivamente como reductor de velocidad. La zona elevada de este badén es de 6 centímetros y su longitud total es de 4 metros.

Consejos para cruzar un bandén

El primer consejo es la reducción gradual de la velocidad antes de llegar al badén. Evita frenar bruscamente justo antes del obstáculo, ya que esto puede hacer que la parte delantera del coche golpee el suelo, causando daños. Pero además de los obvios, existen otros consejos para tener en cuenta al momento de atravesar estos obstáculos elevados.

  • Cruzar en línea recta: enfrenta el badén en línea recta para distribuir el impacto de manera uniforme entre las ruedas delanteras y traseras. Abordar el badén en ángulo puede hacer que una sola rueda absorba todo el impacto, aumentando el riesgo de daño.
  • Evitar cargas excesivas: transportar cargas pesadas puede aumentar el riesgo de daño al cruzar un badén. Si es posible, evita llevar cargas pesadas cuando sepas que tendrás que atravesar varios badenes.
  • Evita pisar el embrague o cambiar de marcha al pasar por el badén, ya que hacerlo podría afectar negativamente la mecánica del automóvil.

Para arreglar la suspensión

Cuando la suspensión se daña debido a los badenes, es importante abordar el problema de manera meticulosa para evitar mayores daños y garantizar la seguridad al conducir. Por esta razón es necesario hacer una inspección visual en amortiguadores, struts, muelles y brazos de control. Busca signos de fugas de aceite o daños visibles, muelles o brazos rotos o deformados.

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