Israel difunde un vídeo de un túnel de Hamás en Gaza en el que murieron seis rehenes
Las Fuerzas de Defensa israelíes han hecho público este martes un vídeo de un túnel de la Franja de Gaza donde Hamás habría acabado con la vida de los seis rehenes cuyos cadáveres fueron recuperados en agosto. Las imágenes muestran un pasadizo bajo y estrecho en las profundidades del subsuelo, sin baño y con escasa ventilación.
El descubrimiento de los cadáveres de los secuestrados provocó el mes pasado una oleada masiva de indignación en Israel. Ahora, la publicación del nuevo vídeo podría aumentar la presión sobre el primer ministro Benjamin Netanyahu para que alcance un acuerdo de alto el fuego con Hamás que permita traer a casa a los rehenes restantes.
El portavoz militar israelí, Daniel Hagari, explicó este martes que las imágenes del túnel de Gaza habían sido mostradas a las familias de los rehenes, y que «fue muy duro para ellos ver cómo sus seres queridos sobrevivieron en esas condiciones». El contraalmirante indicó, además, que las pruebas indicaban que los seis se habían estado protegiendo mutuamente cuando fueron asesinados, aunque no detalló cuáles eran esas pruebas.
Entre los seis se encontraba el israelí-estadounidense Hersh Goldberg-Polin, de 23 años, natural de Berkeley (California), cuyos padres encabezaron una campaña mundial de gran repercusión para conseguir su liberación. Goldberg-Polin perdió parte de su brazo izquierdo a causa de una granada en el atentado del 7 de octubre que desencadenó la guerra en Gaza. En abril, Hamás publicó un vídeo en el que aparecía vivo, lo que provocó protestas en Israel.
El Ejército identificó a los demás como Ori Danino, de 25 años; Eden Yerushalmi, de 24 años; Almog Sarusi, de 27 años; Alexander Lobanov, de 33 años; y Carmel Gat, de 40 años. Al parecer, estaba previsto que tres de los seis –incluido Goldberg-Polin– fueran liberados en la primera fase de una propuesta de alto el fuego debatida en julio, lo que avivó aún más la ira cuando fueron hallados muertos.
Las pruebas patológicas realizadas a los cadáveres de los seis, encontrados por el ejército en Rafah, ciudad del sur de Gaza, el sábado 31 de agosto, mostraron que habían sido asesinados en algún momento de la noche del 29 de agosto, según Hagari. Los militares encontraron el pozo de un túnel bajo una habitación infantil y avanzaron por él con cuidado debido al peligro de trampas explosivas, encontrando los cadáveres a unos 120 metros en el interior del túnel, en una zona detrás de una puerta de hierro.
El túnel era bajo y estrecho, y las condiciones de humedad dificultaban la respiración en su interior, explicó Hagari, quien añadió que los soldados israelíes encontraron pruebas que indicaban que los rehenes y «al menos dos terroristas» llevaban allí más de unos días.
Los soldados encontraron un saco con botellas de orina y un cubo excavado en el suelo que servía de retrete improvisado. También se encontraron colchones, ropa, cargadores de fusiles de asalto y proyectiles, así como algunos alimentos, principalmente barritas energéticas y atún. Había manchas de sangre en el suelo.
Hagari dijo que el Ejército había matado a dos militantes que intentaban huir de un complejo de túneles el viernes cerca de donde se encontraron los rehenes y que había «una probabilidad» de que los dos hubieran sido los que mataron a los secuestrados. Las autoridades ya estaban realizando pruebas de ADN para verificarlo.
Hamás secuestró a unas 250 personas durante el atentado del 7 de octubre. Más de 100 fueron liberadas durante un breve alto el fuego en noviembre a cambio de la liberación de palestinos encarcelados por Israel. Ocho han sido rescatados por las fuerzas israelíes, mientras que las tropas israelíes mataron por error a tres rehenes israelíes que habían escapado a su cautiverio en diciembre.
Las autoridades israelíes afirman que 101 rehenes permanecen en cautividad, 35 de los cuales se cree que han muerto. Hamás ha ofrecido liberar a los rehenes a cambio del fin de la guerra, la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza y la liberación de un gran número de presos palestinos, incluidos militantes de alto rango. Pero las negociaciones sobre un alto el fuego no han fructificado.