Estados unidos pone precio a la captura de los dos principales cabecillas de Al Qaeda
Estados Unidos mantiene a los dos máximos dirigentes de Al Qaeda Central (AQC), Abd al-Rahman al-Maghrebi y Sayf al-Adl, entre los terroristas más buscados y existe una recompensa por su captura de siete y diez millones de dólares respectivamente
Se ofrecen hasta siete millones de dólares por información sobre Muhammad Abbatay, también conocido como Abd al-Rahman al-Maghrebi. Al-Maghrebi. Este sujeto es uno de los principales cabecillas de Al Qaeda y se cree que se esconde en Irán. Director de Al-Sahab, el brazo mediático de Al Qaeda, y era yerno y asesor del fallecido Ayman al-Zawahiri.
Los documentos recuperados durante la operación militar de 2011 contra Osama bin Laden, indican que al-Maghrebi ha sido una estrella en ascenso en Al Qaeda durante muchos años. Jefe de Al Qaeda en Afganistán y Pakistán desde 2012. Tras años de presión antiterrorista internacional, se trasladó a Irán, desde donde supervisó las actividades de la banda en todo el mundo. Como jefe de la Oficina de Comunicaciones Externas coordina las actividades con las filiales del grupo .
El mismo programa ofrece una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información sobre Sayf al-Adl. Al igual que el anterior, tiene su base en Irán aunque algunas fuentes señalan que pasa periódicamente a Afganistán donde es bien recibido por el régimen talibán. Forma parte del Majlis al-Shura, máximo órgano de la banda y dirige el llamado "comité militar".
En noviembre de 1998, un gran jurado federal estadounidense presentó cargos contra a al-Adl por su participación en los atentados con explosivos del 7 de agosto de 1998 contra las embajadas de Estados Unidos en Dar es Salaam, Tanzania, y Nairobi, Kenia. Murieron 224 civiles y más de 5.000 personas resultaron heridas.
Tras los atentados contra las embajadas , se trasladó al sureste de Irán y vivió bajo la protección del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica. En abril de 2003, las autoridades de Teherán lo pusieron bajo arresto domiciliario junto a otros dirigentes de Al Qaeda. En septiembre de 2015, el gobierno iraní liberó a al-Adl y a otros cuatro altos dirigentes del grupo yihadista a cambio de un diplomático iraní secuestrado por Al Qaeda en Yemen.
Fue “lugarteniente” de Abu Musab al-Zarqawi, fundador de Al Qaeda en Irak, que posteriormente se convirtió en el Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS). Ya en 1990, al-Adl y otros individuos impartieron entrenamiento militar y de inteligencia en varios países, como Afganistán, Pakistán y Sudán, a miembros de la banda y de sus grupos afiliados, como la Yihad Islámica egipcia.
En 1992 y 1993, proporcionó entrenamiento militar a operativos de Al Qaeda y a miembros de tribus somalíes que lucharon contra las fuerzas estadounidenses en Mogadiscio, durante la Operación Restaurar la Esperanza.
Como teniente coronel de las fuerzas especiales egipcias a mediados de la década de 1980, participó en los esfuerzos por derrocar al gobierno de ese país. En 1987, fue detenido junto con otros miles de militantes antigubernamentales tras un intento de asesinato contra el ministro del Interior. Las autoridades liberaron y luego degradaron a al-Adl, quien en 1989 viajó a Afganistán, donde se convirtió en entrenador de la naciente Al Qaeda.