Todas las palabras que usamos los españoles cuyo origen es árabe
El idioma español, uno de los más hablados y ricos del mundo, es el resultado de siglos de influencias de diversas culturas, y entre ellas, una de las más profundas y notorias es la árabe. Durante los más de 700 años de presencia musulmana en la Península Ibérica, que comenzó en el siglo VIII, el árabe dejó una huella indeleble en el idioma, la cultura y hasta la vida cotidiana. Hoy, los españoles seguimos utilizando miles de palabras de origen árabe, a veces sin saber que nuestras conversaciones diarias están llenas de reminiscencias de esa época histórica.
Agricultura, ciencia y matemáticas: la herencia árabe en el léxico español
Uno de los ámbitos donde más claramente se refleja la influencia árabe es el de la agricultura y el campo, un sector en el que el conocimiento y las técnicas avanzadas de la cultura musulmana trajeron consigo no solo términos, sino también prácticas que se extendieron por toda la península. Palabras como acequia (canal de agua), aceituna (del árabe az-zayt, que significa "el jugo de la aceituna"), albahaca (hierba aromática) o alcachofa se encuentran en nuestra mesa y en nuestros campos como un legado lingüístico de aquellos tiempos.
En el campo de las ciencias y las matemáticas, los términos árabes se multiplican. La palabra álgebra, que deriva de al-jabr, una rama de las matemáticas desarrollada por el matemático Al-Khwarizmi, es solo una de las tantas. Cero, noria y alquimia son otros ejemplos de palabras de origen árabe que aluden al vasto conocimiento científico y técnico que los musulmanes transmitieron a Europa y al mundo occidental.
Vida cotidiana: términos árabes que usamos sin saberlo
En el día a día, el español está repleto de palabras que delatan esta influencia, especialmente en el sur del país, donde fue más duradera la presencia árabe. La lista incluye palabras comunes como ojalá (del árabe in sha’a Allah, "si Dios quiere"), que usamos para expresar deseos, o hasta, una preposición que también tiene raíces árabes.
Barrio (del árabe barri, que significa "exterior"), jarra, albornoz, almohada y alfombra son otras palabras que usamos habitualmente y que tienen un origen árabe claro. También muchos nombres de lugares y ciudades, como Guadalajara (del árabe wadi al-hayara, "río de piedras") y Almería (del árabe al-Mariyya, que significa "la torre de vigilancia"), nos recuerdan la larga presencia musulmana en España.
El árabe en la gastronomía
La gastronomía es otro de los ámbitos en el que la influencia árabe es especialmente notable. Las palabras azúcar y arroz, elementos indispensables en la cocina española, tienen su origen en el árabe, al igual que el delicioso turrón, un dulce tradicional que se consume especialmente en Navidad y que fue introducido en la península por los musulmanes.
Además, muchos platos típicos de la cocina española actual, como la albóndiga (de al-bunduqa, que significa "la bola" en árabe) o la aceituna (del árabe az-zayt), son herencia directa de las costumbres culinarias traídas por los musulmanes.
Términos jurídicos y administrativos
La influencia árabe también llegó al ámbito administrativo, jurídico y militar, con palabras como alcalde (del árabe al-qadi, "juez"), alguacil (funcionario menor en la administración) y (del árabe amir al-bahr, "príncipe del mar"). Estos términos, utilizados en las cortes y en la administración pública, fueron fundamentales en la estructura de gobierno y control social de la época, y muchos de ellos perduraron incluso después de la Reconquista.