¿Acabará Trump con la Guerra de Ucrania? Esto es lo que creen los líderes europeos
Donald Trump ha vuelto al Despacho Oval de la Casa Blanca cuatro años después. Será a partir de enero cuando tome posesión como 47º Presidente de los Estados Unidos, superando a Biden como el mandatario americano más longevo en acceder al puesto.
Lo ha hecho tras ganar a la candidata demócrata Kamala Harris, con un resultado final de 223 votos electorales frente a los 279 conseguidos por el candidato republicano, quien ya fue mandatario americano entre los años 2016 y 2020.
Una vez tome posesión del cargo en las primeras semanas del año, Trump deberá afrontar un panorama geopolítico marcado por la inestabilidad producida por los conflictos en Oriente Próximo, protagonizados por Israel e Irán; el asentado protagonismo económico - político en el caso de China y creciente en el de India; así como el conflicto en Ucrania.
Una vez conocida la victoria de Trump la pasada madrugada, fue precisamente el mandatario actual ucraniano, Volodímir Zelenski, uno de los primeros en felicitar al candidato republicano.
"Recuerdo la gran reunión que tuvimos con el Presidente Trump el pasado septiembre, cuando discutimos en detalle acerca de la alianza estratégica entre Ucrania y Estados Unidos, el plan para la victoria y más alternativas para acabar con la agresión rusa contra Ucrania", aseguró Zelenski, quien también quiso manifestar que aprecia el compromiso del presidente Trump con su aproximación de los asuntos internacionales, marcada por su concepto de "paz a través de la fuerza".
Sin embargo, Trump ya ha manifestado su intención de no alargar los conflictos internacionales, ya que, según sus propias palabras, no va a empezar guerras, sino que las va a terminar.
Trump y Ucrania
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ya ha manifestado en un encuentro en Viena que está convencido que Trump lograría de manera rápida un alto en fuego en Ucrania en caso de victoria electoral, así como el conflicto en suelo ucraniano está perdido y que "Europa [...] solo puede crear la guerra, pero no la paz".
En términos similares se ha expresado el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, quien espera que su "amigo" contribuya a terminar las guerras nacionales y globales, como la mencionada de Ucrania y las tensiones en Oriente Próximo; y el presidente eslovaco, Robert Fico.
A ellos también se les ha unido el primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson, quien admitió que el triunfo de Trump puede suponer una reducción del apoyo de Estados Unidos hacia Ucrania, más aún si se tiene en cuenta que EE.UU. "es el principal contribuidor" del país liderado por Volodímir Zelenski.
Alineándose con estas afirmaciones, los datos de Statista del pasado mes de febrero, Estados Unidos supone una ayuda para Ucrania superior a los 65.000 millones de euros, siendo 43.000 apoyo militar. El último paquete de ayuda anunciado, concretamente, data del pasado 6 de septiembre.
Según el gobierno saliente de Joe Biden, este tiene un valor de 250 millones de dólares en armas y equipo, incluyendo "misiles y apoyo de defensa aérea, municiones para sistemas de cohetes y artillería, armas antitanque, vehículos de combate de infantería Bradley y otros vehículos blindados, y otras capacidades prioritarias".
Por tanto, y en caso de que Trump decida reducir o eliminar toda ayuda hacia Ucrania, sin duda las circunstancias empeorarían para el gobierno de Zelenski, que en los últimos meses siempre ha manifestado la necesidad continua de material para continuar con la defensa del territorio.
Trump, por su parte, manifestó en una entrevista el pasado año que mantendría una buena relación tanto con Zelenski como con el presidente ruso, Vladimir Putin, así como acabaría con el conflicto "en un solo día".
En una reciente entrevista en el podcast de Lex Fridman, el magnate aseguró que ya tenía "un plan muy exigente" para finalizar el conflicto, aunque no dio detalles porque, en caso de hacerlo, no podría utilizarlos en el futuro y no tendrían éxito.
JD Vance, candidato a la vicepresidencia de los EE.UU. con Trump, desveló en otra entrevista que iniciaría negociaciones, en primer lugar, con Rusia, Ucrania y los diferentes países interesados en el fin de las hostilidades, detallando que el Kremlin conservaría las zonas ocupadas en el territorio ucraniano y que Ucrania mantendría su soberanía a cambio de mantener su neutralidad no uniéndose a la OTAN.