DANA: Sanidad considera "moderado" el riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos
Los mosquitos son los responsables de la transmisión de enfermedades como la malaria, el dengue, el zika, el chikungunya, la fiebre amarilla y el virus del Nilo Occidental (FNO). Aunque son enfermedades propias de zonas tropicales, lo cierto es que están emergiendo en Europa, sobre todo la que provoca el FNO, para el que aún no hay vacuna ni tampoco tratamiento específico.
Numerosos mosquitos capaces de transmitir estas enfermedades están presentes y extendidos en gran parte de la geografía española. Tal es el caso del Aedes albopictus, conocido como mosquito tigre que, desde la primera vez que fue visto en 2004 en Barcelona, ha consolidado su presencia en la Península.
Más dramático es el caso del mosquito transmisor del FNO -Culex pipiens- que ha causado este año una situación crítica en Andalucía, concretamente los municipios ubicados en la cuenca del Guadalquivir. En lo que va de año, se han notificado más de 65 casos y las víctimas mortales ascienden a cinco. También se han dado casos autóctonos de dengue.
Masas de agua estancada
Tanto Sanidad como los especialistas reconcen que la presencia de masas de agua estancada tras la DANA favorecerá la proliferación de mosquitos vectores mientras la temperatura continúe en rangos favorables. Ante esto, la probabilidad de transmisión de la FNO se considera moderada mientras dichas condiciones se mantengan teniendo en cuenta que en los años anteriores se han detectado casos en humanos y en caballos en áreas próximas a las zonas inundadas.
Esta probabilidad, una vez pasada la temporada activa del vector, es baja.
La mayoría de los casos de la enfermedad producida por el FNO son leves, como fiebre, dolor de cabeza, dolores de cuerpo, erupción cutánea o ganglios linfáticos inflamados. Sin embargo, si el virus entra al cerebro se pueden producir alteraciones neurológicas graves para las que no existe un tratamiento específico, por lo que el impacto se considera moderado.
Por su parte, la probabilidad de que se produzcan casos autóctonos de dengue, zika o chikungunya en las áreas afectadas en las que está presente Ae. albopictus, depende tanto de la densidad del mosquito como de la existencia de casos importados; ambos factores suelen descender en esta época del año, aunque podrían registrarse casos virémicos importados durante los desplazamientos internacionales navideños y persistir vector activo si las temperaturas son templadas.
El impacto de las enfermedades transmitidas por 'Aedes' se considera bajo dado que la mayoría de los casos desarrollarían enfermedad leve. Además, el Ministerio asegura que el Sistema Nacional de Salud es capaz de detectar y manejar de forma correcta los casos.