¿Qué santo se celebra hoy, sábado 7 de diciembre? Todo lo que debes saber del santoral de hoy
El santoral, también conocido como calendario litúrgico, es un libro religioso que contiene la lista de los santos reconocidos por la Iglesia Católica y que se celebra cada día del año. Más allá de una simple lista de nombres, el santoral representa un viaje fascinante a través de la fe, la historia y la cultura cristiana.
¿Qué santos se celebran hoy, sábado 7 de diciembre?
- San Eutiquiano, Papa: Papa entre los años 275 y 283, destacó por su dedicación al cuidado de los mártires cristianos y sus tumbas.
- San Sabino de Spoleto: Obispo y mártir, sufrió persecución bajo el emperador Maximiano. Es venerado especialmente en Italia por su valentía y fe inquebrantable.
- Santa Farailda de Gante: También conocida como Santa Verilda, fue una virgen consagrada de origen belga que dedicó su vida a la oración y a las obras de caridad.
San Ambrosio: Vida y Pontificado
San Ambrosio nació en el año 340 en Tréveris, en una familia romana de alto rango. Se formó en derecho y retórica, convirtiéndose en gobernador de la región de Liguria y Emilia, con sede en Milán. En el año 374, tras la muerte del obispo arriano de Milán, Ambrosio fue elegido como su sucesor, aunque aún era un laico y no había recibido el bautismo.
En cuestión de días, fue bautizado, ordenado sacerdote y consagrado obispo. Como pastor, se dedicó a combatir las herejías, especialmente el arrianismo, que negaba la divinidad de Cristo. Su firmeza y sabiduría lo convirtieron en una figura central en la Iglesia de su tiempo. También destacó como autor de himnos litúrgicos y como consejero espiritual, siendo clave en la conversión de San Agustín.
Canonización y Legado
San Ambrosio fue reconocido como santo poco después de su muerte, y su influencia como uno de los Padres de la Iglesia Latina le valió el título de Doctor de la Iglesia. Fue un ejemplo de liderazgo firme, erudición y dedicación al servicio de la fe.
Es recordado por sus escritos teológicos, sermones y himnos, muchos de los cuales aún forman parte de la liturgia católica. Su festividad se celebra el 7 de diciembre, día de su ordenación episcopal. Además, es el patrono de Milán y de los apicultores, debido a una leyenda que cuenta que, de niño, unas abejas se posaron sobre su boca sin dañarlo, interpretado como un presagio de su elocuencia.
Exilio y Muerte
San Ambrosio no sufrió un exilio literal, pero enfrentó numerosos conflictos y desafíos durante su vida. Defendió la autonomía de la Iglesia frente al poder imperial, incluso enfrentándose al emperador Teodosio, a quien obligó a realizar penitencia pública tras la masacre de Tesalónica.
Falleció el 4 de abril del año 397 en Milán. Fue enterrado en la Basílica de San Ambrosio, que él mismo había fundado. Su vida y obra dejaron una huella imborrable en la Iglesia, consolidando su papel como líder espiritual y defensor de la ortodoxia cristiana.