Clamor de los guardias civiles ante el intento de la Generalitat por expulsarles de Cataluña

Los guardias civiles de Cataluña, en unidad de acción, han mostrado su "total y absoluta disconformidad" ante el posible traspaso de las competencias actualmente asumidas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en los puertos y aeropuertos de Cataluña que, subrayan "no obedece a necesidad alguna ni a razones operativas, sino a un mero intercambio político". Por ello, las asociaciones de guardias civiles han indicado a través de un comunicado que se reservan el derecho al ejercicio de las acciones legales pertenecientes en todo aquello que conculque la legislación vigente y las condiciones de vida de los guardias civiles". Y es que, precisamente esta nueva cesión, que adelantó el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, que iba a reclamar al ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska constituye una nueva afrenta para los guardias civiles y pone en peligro sus destinos. Asimismo, denuncian la "falta de escrúpulos" a la hora de que echen a la Guardia Civil de sus casas, de su tierra y que estos sean una y otra vez "moneda de cambio de nuestros dirigentes" y alerta de la preocupación que están viviendo tanto los agentes como sus familias.

Las asociaciones de guardias civiles recuerda que la Ley Orgánica 2/1986 de 13 de marzo disponte las competencias sobre la "custodia de vías de comunicación terrestre, costas, fronteras, puertos, aeropuertos, centros e instalaciones que por su interés lo requieran "asiste a la Guardia Civil" y advierten de que en concreto, los puertos y aeropuertos de Barcelona son "objetivos estratégicos fundamentales para el Estado" ya que fueron objetivo de "Tsunami Democratic" en los disturbios de 2019.

Los guardias civiles alertan del intento de echar a la Guardia Civil de Cataluña que se va consolidando paso a paso primero con el cese de las competencias, hasta ahora compartidas por el Seprona, "relegando a este especialidad de la guardia civil, ya no solo a un segundo plano, sino a un extinción prácticamente total". A este cese se sumaría el cierre de la unidad de Gedex de Lleida o la unidad del Greim de la provincia de Girona al que se uniría la petición de retirarle la competencia ahora de puertos y aeropuertos. Critican la propuesta y consideran que "en ningún momento parece que Illa haya reflexionado sobre el bienestar de los ciudadanos con este tipo de acuerdos" además, advierten de que no ha considerado que la "escasez de personal de la policía catalana, la cual no tiene suficientes efectivos para paliar los altos índices de criminalidad con los que cuenta actualmente Cataluña".