El Clásico, del homenaje a Llull a la lesión de Deck
El Clásico comenzó con un homenaje al capitán del Real Madrid. Sergio Llull firmaba su enésimo récord en los últimos meses, el número de partidos totales jugados con el Real Madrid en la ACB, y el club le rindió honores. Florentino Pérez apareció en el centro de la pista con una camiseta con el dorsal 620, el número de partidos de Llull en la Liga Endesa con los blancos superando la marca de Felipe Reyes. La celebración se vio ensombrecida por la lesión de Gaby Deck en el tercer cuarto. El alero argentino cayó mal después de realizar un mate y todo apunta a una lesión en el isquio de la pierna izquierda. De Chus Mateo a Campazzo, la única preocupación del Madrid después del partido era el estado físico del argentino, una pieza clave en el grupo.
Al margen de lo de Deck, la victoria dejó «un buen sabor», según el entrenador. «Estamos luchando por volver a ser nosotros mismos. Perdimos algo de confianza hace semanas, pero ya veníamos en buena dinámica y victorias como esta ayudan. Ahora espero que lo de Gaby no sea nada porque es un jugador muy, muy importante para nosotros», confesó el técnico.
Campazzo reveló que el Madrid no cerró «el partido como queríamos, podíamos haberlo hecho un poquito mejor. Pero en los detalles estuvimos bien. Hubo buenas defensas, buenos rebotes... se disfruta muchísimo porque son tremendas batallas. No hicimos nuestro mejor partido, pero es importante ganar jugando de esta manera». «Tenemos que aprovechar las rotaciones largas porque eso nos hace más impredecibles y más difíciles de defender», comentó sobre la distribución de tiempo en cancha que tuvo ante el Barça.
Más allá del Clásico la última jornada del año dejó al Unicaja y al Valencia al frente de la ACB con diez victorias y tres derrotas. El Valencia cayó en su visita a Gran Canaria en un festival ofensivo. El Unicaja, que está lejos del equipo que empezó la temporada, superó al Río Breogán. A cuatro jornadas para definir los puestos de clasificación para la Copa, el Baskonia sigue fuera de los ocho mejores y el Barcelona no está entre los cabezas de serie.