Aragonès invoca al 'Dios de la lluvia'
Corría 1988 cuando El Último de la Fila , poseídos por el genio, cantaban aquello de «Dios de la lluvia apiádate, de las bestias y de mí...». Unos inspirados Quimi Portet y Manolo García invocaban al cielo para redimir «un mundo polvoriento y gris», algo que casi cuatro décadas después bien podría aplicarse a esta Cataluña agostada, de pantanos vacíos y fatiga política. Nadie imagina al muy «soso, serio y formal» Pere Aragonès haciendo requiebros en un escenario rogando al «Dios de la lluvia» , pero... Читать дальше...