El gasto público tira de la economía española mientras la productividad sigue menguando
El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó ayer los datos sobre la evolución de la economía española en 2023 que ya adelantó a finales de enero. El PIB, como avanzó entonces, cerró el pasado ejercicio con un avance del 2,5%, con una mejora del 0,6% en el último trimestre del año respecto al anterior, dos décimas mejor que en el trimestre previo. De este modo, la economía española encadenó su tercer crecimiento anual consecutivo, aunque el de 2023 ha sido el más moderado de dicho periodo: en 2021, el PIB avanzó un 6,4%, en 2022 creció un 5,8% y ahora ha suavizado su impulso hasta el 2,5%, según los datos de Contabilidad Nacional.
Pero la pérdida de fuste no es el único punto oscuro de la estadística hecha pública ayer. Y es que detrás de ese 2,5% de mejora del PIB se esconde una economía que avanza, en gran medida, gracias al incremento del gasto público y que, además, ha empeorado en productividad.
Sector público
El crecimiento español del año pasado, como ya avanzó también el INE en enero, se sustentó fundamentalmente en el consumo interno. Mientras que la demanda nacional -consumo e inversión- contribuyó en 1,7 puntos al crecimiento del PIB, la externa lo hizo en 0,8 puntos. En ambos casos, supone retrocesos de 1,2 y 2,1 puntos, respectivamente.
Igualmente, el INE pone de manifiesto en su informe que las administraciones siguen tirando de gasto para mantener engrasada la maquinaria. En el último trimestre del año, el gasto en consumo final se aceleró 1,4 puntos respecto al mismo trimestre de 2022 al crecer un 2,9%. El de los hogares aumentó un 2,3%, tasa 1,9 puntos mayor que el trimestre anterior; mientras que el de las administraciones públicas lo hizo casi el doble, un 4,4%, dos décimas menos que en el trimestre precedente.
Respecto al tercer trimestre, el gasto de los hogares se incrementó un 0,3%, mientras que el realizado por las administraciones públicas se mantuvo muy por encima, en el 1,4%.
En el conjunto del año, el consumo de los hogares creció el 1,8% y el de las administraciones públicas más del doble, el 3,8%.
Como destacó ayer Daniel Lacalle, doctor en Economía y economista jefe de Tressis, de los 2,5 puntos porcentuales que ha crecido el PIB español entre 2019 y 2023, 2,3 puntos son atribuibles al gasto público.
Respecto a la productividad, uno de los grandes talones de Aquiles de la economía española, las cosas no van a mejor. Según recoge la estadística del INE, la productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo registró en el último trimestre de 2023 una tasa interanual del -1,8%, mientras que la productividad por hora efectivamente trabajada fue del -0,8%. En términos intertrimestrales ambas tasas fueron del -0,1%. Se trata de los mayores descensos desde el primer trimestre de 2021 y desde el segundo del mismo año, respectivamente. A estos dos malos datos sobre productividad se suma que los costes laborales unitarios se incrementaron un 6,5%.
[[QUOTE:PULL|||Al mal dato sobre la productividad se suma un incremento del 6,5% de los costes laborales unitarios]]
La inversión también se mostró a la baja en 2023. Según los datos del INE, avanzó un 0,8%. No obstante, esta tasa es 1,6 puntos inferior a la de 2022, cuando creció un 2,4%, y está también por debajo del 2,8% que registró en 2021. En el último trimestre del año, registró una variación del -0,4%, inferior en 1,2 puntos a la del mismo trimestre de 2022. En tasa trimestral, se recuperó ligeramente y avanzó un 0,2%. No obstante, la inversión empresarial en maquinaria y bienes de equipo se desplomó el 4,7%, mientras que la inversión en vivienda y construcción cedió también el 0,3%.
A pesar de la pérdida de impulso evidente de la economía española, desde el Ministerio de Economía consideran que el comportamiento de la economía española en 2023 fue más que reseñable. El titular de la cartera, Carlos Cuerpo, destacó en un comunicado que el crecimiento ha sido más de cinco veces superior al de la media de la zona euro y el más elevado entre las principales economías europeas.
Cuerpo también destacó que la afiliación a la Seguridad Social ha marcado un récord y roza ya los 21 millones, lo que, según aseguró, significa que 4 de cada 10 empleos creados en la zona euro en 2023 fueron en España.
El ministro de Economía también reseñó que la capacidad de financiación de la economía española frente al exterior alcanzó los 51.000 millones de euros en 2023, su máximo histórico, lo que, según dijo, significa que «nuestro crecimiento ya no es dependiente de la financiación del exterior». A ello, añadió, se suman 4.751 proyectos de inversión nuevos en España en los últimos 5 años, lo que, según Economía, sitúan a España como el cuarto país del mundo que ha recibido más proyectos de nueva inversión.
A pesar de todas las críticas de organizaciones independientes sobre la ejecución de los fondos europeos, Cuerpo también sostuvo que cerca de la mitad de los fondos asignados en la primera fase del Plan de Recuperación, unos 32.300 millones de euros, ya han llegado a la economía real.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó también en Vitoria, donde visitó las obras de ampliación de la planta del fabricante alemán Mercedes-Benz, que España ofrece «razones sólidas» para la confianza empresarial y para atraer industria y afianzar la que tiene con su «apuesta valiente» por las energías limpias y con «un precio competitivo».