Gruconsa reclama a la RFEF una deuda de más de 105.000 euros
La compañía Gruconsa, que está en el centro del caso Supercopa por los pagos realizados a la empresa de un amigo de Luis Rubiales tras recibir contratos de obra desde la Federación Española de Fútbol durante su presidencia, ha contestado al burofax que recibió de la institución anunciando la rescisión de cualquier contrato vigente entre ambos que no hay nada en marcha susceptible de parar, pero sí una deuda pendiente de 105.625 euros por un trabajo culminado el 21 de marzo, en pleno estallido de la operación Brody. Gruconsa, donde trabaja el hermano del responsable jurídico de la Federación, respondía así tras la comunicación que recibió el 28 de marzo «que rescinde cualquier relación mercantil formalizada o en vías de formalización» entre ambas partes: «No se puede rescindir aquello que no existe». La empresa habla de «asombro y disconformidad», pues «no existe» relación que cancelar y sí esa cuenta aún no saldada. «No podemos entender el burofax enviado, más que como parte de la estrategia de defensa de algún interés propio de la RFEF que obviamente desconocemos», dice la empresa, para subrayar que «desde marzo del año 2019, Gruconsa sólo ha mantenido actuaciones concretas con la RFEF derivadas de determinadas obras que o bien se encuentran terminadas hoy en día o bien no se llegaron a formalizar» y en las que se ha «seguido escrupulosamente con la regulación establecida». Noticia Relacionada estandar Si El amigo de Rubiales esquivó dos veces a la UCO antes de ser detenido el 2 de abril Isabel Vega Le esperaban el 20 de marzo en Barajas, pero cambió su vuelo en el último momento y tampoco embarcó en el siguiente Según detalla, la deuda obedece al concepto de «honorarios técnicos» por los proyectos de actuaciones en la Ciudad Deportiva de Las Rozas, un presupuesto que fue aprobado en septiembre de 2023 por el informe de deficiencias que había enviado el ayuntamiento del municipio madrileño a la Federación sobre sus instalaciones. El encargo a Gruconsa «únicamente versaba sobre el estudio y concreción de las deficiencias detectadas», se «realizó debidamente» y fue remitido a la Federación en diciembre de 2023, así como se cumplimentó el pasado 21 de marzo el requerimiento sobre el mismo del mencionado consistorio. «Sobra decir que con qué entidad realice la RFEF las obras necesarias para el cumplimiento de tal informe ni es asunto de Gruconsa ni nos compete», añaden. «En este sentido y a consecuencia del anterior trabajo realizado, procede recordarles que la RFEF mantiene una deuda cierta, líquida y exigible con Gruconsa por la cantidad de 105.625 euros, anunciando desde este momento que se ejercerán las acciones judiciales oportunas para el cobro de esta», destaca la comunicación de la compañía. Las puertas que compró la Federación Hay un elemento pendiente más y son las puertas de la Ciudad del Fútbol de las Rozas que se encargaron en septiembre de 2023, cuando se presupuestó la demolición, desmontaje y colocación de 20 puertas en las instalaciones que Gruconsa ya había iniciado. «Los materiales para el montaje ya están preparados por nuestro proveedor, siendo que estaba prevista su instalación para el pasado 1 de abril, por lo que les requerimos para que nos informen cómo proceder para la entrega de tales materiales, cuyo coste de fabricación fue sufragado con el adelanto que depositó la RFEF». La compañía, que no está imputada como persona jurídica, indica además que «nunca ha participado en al comisión ed hecho alguno que pudiese ser constitutivo de responsabilidad penal, y siempre ha confiado en la gestión interna de la RFEF respecto a sus procedimientos de contratación y en los controles de auditoría de los que dispone».