La jueza convoca mañana una vista para decidir si autoriza la eutanasia de una joven de Barcelona
Tras paralizarla in extremis el pasado jueves, la magistrada ya cuenta con un informe forense para dilucidar si está en condiciones de tomar la decisión pese a sus problemas mentales
La titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 12 de Barcelona ha convocado mañana una vista para pronunciarse sobre la eutanasia de la joven de 23 años con problemas mentales que se frenó in extremis por orden judicial a petición de su padre. La magistrada toma esta decisión tras haber recibido del Juzgado de Primera Instancia número 8 de Vilanova i la Geltru "la exploracion judicial y el informe del medico forense" sobre la situación clínica de la joven.
A la vista, que se celebrará en una sala del juzgado, según acuerda la jueza en una providencia a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, deberán asistir tanto la Fiscalía como el letrado de la Fundación Española de Abogados Cristianos, en nombre del padre de la joven, quien logró frenar la eutanasia de su hija, que estaba previsto que se llevase a cabo el pasado viernes en el Hospital Sant Camil de la localidad barcelonesa de Sant Pere de Ribes.
La magistrada paralizó la eutanasia 24 horas antes de forma cautelar, a instancias del padre de la joven, N. C. R., para evitar "perjuicios irreparables". y una posible vulneración de su derecho a la vida, dado que el progenitor considera que el hecho de no estar en pleno uso de sus facultades mentales, por los graves problemas psicológicos que padece, le impide decidir al respecto de forma "libre y consciente".
En el escrito en el que pidió paralizar la medida, Abogados Cristianos argumentaba que el estado de salud de la joven -que padece un trastorno límite de la personalidad y otro obsesivo compulsivo y con un grado de discapacidad del 74%- "es susceptible de mejoría" y hacía hincapié en que "tiene aún muchísima vida por delante" dado que su esperanza de vida "no se ha visto afectada". En 2022, y debido a un intento de suicidio, sufrió una lesión medular y perdió parte de la movilidad de ambas piernas.
Abogados Cristianos, recurrió en nombre del padre de la mujer la decisión de la Comisión de Garantía y Evaluación de Cataluña de autorizar la eutanasia, planteando un procedimiento de protección de derechos fundamentales. En ese escrito, sostiene que los trastornos mentales que padece, "que incluyen ideación suicida, ideas paranoides y trastorno bipolar", pueden afectar a su capacidad para
"tomar una decisión libre y consciente sobre la eutanasia" puesto que las enfermedades mentales graves "pueden nublar el juicio y la capacidad de valorar adecuadamente las opciones disponibles".
La asociación que preside Polonia Castellanos hace hincapié en que el Estado "tiene la obligación de proporcionar a la chica todos los tratamientos y apoyos necesarios para mejorar su salud
mental y aliviar su sufrimiento" y denuncia que en este caso "lo que está sucediendo es que a una persona de 23 años que ha sufrido intentos de suicidio y que padece trastornos severos se
le fuerza a recurrir a la eutanasia sin cumplir los requisitos legales para ello". "Los profesionales de la salud deben priorizar el tratamiento y el apoyo a la paciente para mejorar su estado mental y evitar decisiones precipitadas sobre el fin de la vida", defiende.
En su solicitud de paralización cautelar de la eutanasia, la asociación aludía a los "cambios manifiestos en su estado de ánimo", que le han llevado a "modificar varias veces su postura con respecto a la eutanasia". Y señalaba que el trastorno límite de la personalidad que sufre es una enfermedad mental "que afecta gravemente a la capacidad de una persona para controlar sus emociones". Una "pérdida de control emocional" que, advertía, "puede aumentar la impulsividad, dando como resultado un criterio de actuación poco claro y errático".
El trastorno obsesivo compulsivo que padece, hacía hincapié, se manifiesta a través de "pensamientos recurrentes y obsesivos sobre su propia muerte e ideaciones de suicidio", por lo que considera "evidente" que la solicitud de la eutanasia "es un síntoma más que cambiaría con el pertinente tratamiento médico".
"No solo intentó poner fin a su vida con el suicidio, que le provocó las lesiones", recuerda, sino que "anteriormente había tenido intentos previos con la ingesta de medicamentos, muestra palpable de que su tendencia suicida es previa al estado de salud presente".
En definitiva, la representación letrada del padre de la joven defiende que su actual estado "no es el idóneo para tomar decisiones tan drásticas como su propia muerte, por lo que debe ser rechazada o aportarse informe psiquiátrico sobre su capacidad para el otorgamiento de esta decisión". Un informe, precisamente, que la jueza ya tiene entre las manos y que será clave para determinar si autoriza que la eutanasia siga o no adelante.