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Caso Horta: El viejo negocio de Jorge Mendes que indigna a Málaga

Si bien no acapara demasiados focos a nivel nacional porque sus protagonistas no están entre los clubes más grandes de Europa, el mundo del fútbol está a punto de ver la resolución de uno de sus culebrones judiciales más largos. Y el protagonista es un equipo español. En el litigio hay, también, un jugador de alto nivel, un club portugués y uno de los agentes FIFA más poderosos del mundo.

Se trata del conocido como caso Horta. El club español es el Málaga, el portugúes, el Sporting de Braga. Y ese superagente no es otro que Jorge Mendes. Y con estos ingredientes, en cuestión de siete días debería estar listo el puchero. Hablando en cristiano: la conclusión del caso. Pero, para aquellos que no estén familiarizados con él, comencemos desde el principio, porque el origen de este caso cumple ahora una década.

Corre el año 2014. El Málaga CF ya ha competido en su primera Champions League, y no está en la Europa League porque la UEFA le metió una sanción tan ejemplar, tan tan ejemplar, que no se recuerda ninguna otra parecida. Más allá de lo deportivo, la situación económica del Málaga sigue siendo preocupante. Todo jugador que destaca acaba siendo traspasado y, para suplirlo, la dirección deportiva -entonces con Mario Husillos al frente- trata de traer talento joven con la intención de comprar barato, revalorizar y vender caro después.

Entre esos fichajes llegó un jovencito llamado Ricardo Horta. Extremo eléctrico y habilidoso de 20 años. Una perla, dicen los informes que llegan desde Portugal. El Málaga paga 500.000 euros al Vitória de Setúbal luso y el chico comienza su andadura como malaguista. Hace una primera temporada decente -tres goles en 37 partidos y 2.000 minutos-, pero en la segunda da un paso atrás. Y el Málaga de Míchel no cuenta con él, por lo que se va cedido al Sporting de Braga. Allí mejora y los lusos deciden intentar su fichaje. Aquí viene el lío.

El incumplimiento

El traspaso de Horta al Sporting de Braga, en 2017, se hizo de forma gratuita a cambio de la cesión del lateral izquierdo Juankar y, también, a que en caso de un futuro traspaso el Málaga se quedaba con el 66 por ciento de ese montante. Lo de “El Málaga” es entre comillas, porque ahora veremos que esa cantidad también hay que partirla. Además, en el contrato se incluía una cláusula por la cual el Braga debía informar de cualquier oferta por el jugador que estuviese por encima de los 10 millones, y el Málaga tendría voz y voto en la decisión final.

Y este es el asunto. Que hubo una oferta de 17 millones por parte del Benfica, y el Braga la rechazó de forma unilateral y sin comunicársela al Málaga. De este modo, la entidad de Martiricos decidió, después de varias reclamaciones entre clubes, denunciar a los portugueses ante la FIFA por el incumplimiento.

En un principio, la FIFA le dio la razón al Málaga y condenó al Sporting de Braga a abonar una cantidad de 11,7 millones -dos tercios de aquella oferta, por lo que sería como si ese traspaso se hubiese ejecutado- más intereses, un cinco por ciento extra que elevaría el montante final en torno a los 12,2 millones de indemnización.

La mitad, para Mendes

Pero ante esta sentencia cabía recurso. Así que el Braga lo ejerció y acudió al TAS. Desde Málaga siempre se ha insistido en que ese fallo a favor por parte de la FIFA era más que suficiente para que el recurso de los portugueses decayese. Y en el propio club se ha trasladado hacia fuera la idea de que “hasta el último euro” de esa cantidad acabaría viniendo para Málaga.

Como se decía más arriba, ese dinero no es todo para el club. De hecho, ni siquiera es el principal beneficiado. Vuelve a aparecer aquí Jorge Mendes, agente entonces de Horta. Aquel viejo negocio que tanto indigna a Málaga.

De los 11,7 millones, el 50 por ciento serían para Mendes. El Málaga se lleva otro 45%, y el cinco restante para otro agente implicado. El caso es que la semana pasada fue la primera vista en el TAS... y el mensaje del club blanquiazul cambió radicalmente. De “cobraremos hasta el último euro” se pasó a “vamos a intentar llegar a un acuerdo”, y es que el tribunal dio a las partes 15 días para lograr un entendimiento.

Y en este punto están actualmente las cosas. Faltan 10 días para que el plazo expire, y la entente parece cercana, pero no se cierra. Es cierto que, en un juzgado, uno siempre sabe cómo entra, pero nunca de qué manera sale. Y algo debió pasar en esa vista que pudo meter el miedo en el cuerpo a los rectores malaguistas, porque podrían pasar de ir a por todas a quedarse de vacío. Eso sería una derrota durísima, y muy díficil de explicar en la ciudad.

Actualmente, y según las cifras que han trascendido, hubo una primera oferta del Braga de tres millones, que el Málaga rechazó de plano. Actualmente las cifras que han trascendido en Radio Marca Málaga y Málaga Hoy se manejan entre los seis y siete 'kilos' -recordemos, la mitad para Mendes-, y un porcentaje de un futuro traspaso.

El Braga ofrece seis y un 20 por ciento de los derechos de Horta. El Málaga quiere más de siete, y la mitad del pase. De este modo, los malaguistas percibirían algo más de tres millones directos, y se quedarían un buen pellizco si hubiera un traspaso... porque también se ha deslizado que Arabia ha llamado a la puerta de Horta. Pero el jugador ya no es un extremo eléctrico de 20 años, sino un jugador de 30 contrastado, con títulos... y en un punto de su carrera en el que ya probablemente no va a mejorar más.

La reacción del Malaguismo

Después de siete años desde el traspaso, y escarmentada ya de casos parecidos -el de N'Diaye con el Villarreal, entre otros- la afición malaguista salta como un resorte cuando ve cualquier noticia relacionada no sólo con Horta, sino ya con el Sporting de Braga. Entre el Malaguismo cunde la sensación de que el club portugués ha faltado al respeto a los blanquiazules y, en cierto modo, porque el propio Málaga lo ha permitido al no ponerse suficientemente serio.

Además, a esto hay que sumar que el Braga se llevó este verano a Roberto, el delantero que fuera fundamental para el ascenso a LaLiga Hypermotion. Con una cláusula cercana a los 10 millones de euros, el acuerdo final fue de 1,8 millones fijos en varios plazos, y variables que pondrían el total en tres millones en caso de cumplirse. También un 10 por ciento de un futuro traspaso.

Ya el simple hecho de que el Málaga se aviniese a negociar con el Braga este verano se tomó como una afrenta entre muchos sectores de la afición. Ahora, es inevitable que cale la sensación de que los portugueses han vuelto a ganar. En teoría, el próximo día 11 muere el plazo para lograr un acuerdo. Después, asegura el director general Kike Pérez, se darán todas las explicaciónes oportuna de “por qué se ha llegado a este punto”. Málaga las espera con ansia.

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