La brecha del alquiler en Madrid se dispara un 40% en el último año: el precio supera con creces el esperado por los inquilinos
Ser inquilino no está al alcance de todos los bolsillos. Y es que el mercado del alquiler sigue enfrentándose a precios cada vez más elevados, lo que ha provocado que, en un intento por seguir este ritmo de encarecimiento, las personas que buscan arrendar una vivienda, hayan aumentado su intención de gasto. Concretamente, esta subió un 19,1% en el tercer trimestre del año respecto al ejercicio previo, mientras que el incremento del precio del alquiler fue de un 4,1%. Así lo revelan los datos del "Barómetro de la brecha del alquiler" de la plataforma de alquiler HousingAnywhere. Por tanto, hace un año la brecha era de 413 euros de media en Europa y ahora es de 305 euros, aunque la discrepancia sigue siendo "sustancial", puesto que los inquilinos colocaron el filtro del precio un 24,4% por debajo del precio medio de mercado.
Madrid, en cambio, va a contracorriente de la tendencia europea. En la capital española, la diferencia entre el precio previsto por los inquilinos y el precio real de mercado ha aumentado en el último año. Entre julio y septiembre de 2023, la discrepancia era de 170 euros, mientras que en el mismo periodo de este año ha alcanzado los 238 euros, lo que supone un aumento de la brecha del 40%.
"La situación en Madrid es distinta al resto de Europa principalmente porque el precio del alquiler en Madrid ha subido más que en otras ciudades", señala el Regional Manager de HousingAnywhere en España, Carlos Amigo. En este sentido, explica que en la capital el precio ha subido hasta un 17%, por lo que, aunque los inquilinos madrileños incrementaron su filtro de precio un 13,8%, este "no ha sido suficiente para cerrar la brecha entre el precio del alquiler y lo esperado por los inquilinos".
En cambio, en Barcelona (6,7%) y Valencia (3,6%), la discrepancia se reduce, donde el aumento interanual del precio del alquiler ha sido más moderado, la discrepancia se reduce. En la Ciudad Condal, los inquilinos han subido su presupuesto en 200 euros, lo que ha permitido reducir la brecha a 100 euros. Por su parte, en Valencia, la brecha se reduce de 426 a 350 euros.
En Roma la brecha ya alcanza los 1.000 euros
Otras ciudades europeas también experimentan una gran discrepancia entre el precio del alquiler y la expectativas de los inquilinos. El caso más destacado es el de Roma, donde los precios se han incrementado un 28,2% en el último año y la brecha ya alcanza los 1.000 euros. Ámsterdam, Hamburgo y Praga son otras de las ciudades europeas analizadas con una mayor brecha del alquiler que asciende a 490, 465 y 448 euros, respectivamente.
Budapest se sitúa en el lado opuesto, ya que presenta una menor brecha del alquiler con 50 euros de diferencia, seguida de cerca por Róterdam (90 euros), Barcelona y Viena, ambas con 100 euros.