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España registra un 25% más de muertos en carretera de noche desde 2013

La conducción nocturna supone un riesgo significativo para los conductores en España, según el informe "Conducción nocturna: riesgo, accidentalidad y percepción de los conductores españoles (2013-2023)", presentado por la Fundación Línea Directa. Durante la última década, se han registrado 276.000 accidentes con víctimas en horario nocturno, dejando un saldo de 6.500 fallecidos. Solo en 2023, los siniestros nocturnos causaron 641 muertes, un incremento superior al 24 % en comparación con el inicio del periodo estudiado.

Mayor letalidad en accidentes nocturnos

Los accidentes nocturnos resultan significativamente más graves que los diurnos, con un 55 % más de fallecidos y un 10,5 % más de heridos graves. La víctima más habitual es un hombre de 38 años con casi 20 años de experiencia al volante, que conduce un vehículo de entre 10 y 15 años de antigüedad. Estos siniestros ocurren con mayor frecuencia al inicio o al final de la noche, pero proporcionalmente los más letales tienen lugar entre las 3 y las 5 de la madrugada.

El alcohol es un factor clave en el 10 % de las muertes por accidentes nocturnos, lo que llevó a la directora de la Fundación Línea Directa, Mar Garre, a recordar durante la presentación del informe que “el alcohol es incompatible con ponerse al volante”, especialmente en un periodo como las fiestas navideñas, marcado por celebraciones.

Temores de los conductores y percepción del riesgo

Según una encuesta realizada en el marco del estudio, los principales temores de los españoles al conducir de noche son la falta de visibilidad, los deslumbramientos y la somnolencia. Estas preocupaciones están justificadas: 1,5 millones de conductores (5 %) han sufrido un accidente nocturno, mientras que casi el 20 % reconoce haber estado a punto de tener uno. Además, más de 10 millones (39 %) admiten haber dado “cabezadas” al volante.

Medidas propuestas por los ciudadanos

Para reducir la siniestralidad nocturna, los ciudadanos proponen, principalmente, mejorar la iluminación en carreteras convencionales (68 %), prohibir la circulación nocturna de ciclistas (37 %) y de peatones (24 %) por vías interurbanas.

Zonas y comunidades más peligrosas

Entre los tramos más peligrosos de España para conducir de noche destacan:

  • AP-7 en Tarragona (km 328-345): 18 fallecidos.
  • N-340 en Castellón (km 1028-1043): 13 fallecidos.
  • A-7 en Málaga (km 167-177): 11 fallecidos.

Por comunidades autónomas, Navarra, Castilla y León, y Castilla-La Mancha presentan la mayor proporción de accidentes mortales en horario nocturno. En el lado opuesto se encuentran Madrid, Cataluña y el País Vasco, con las cifras más bajas.

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