Acompañado de una amplia sonrisa, Sergio Ramos se ha despedido del Sevilla FC este martes en el mismo escenario en el que hace diez meses fue presentado por todo lo alto. El camero ha cerrado su segunda etapa en el club en el que se formó asegurando que se marcha «con la cabeza bien alta y la conciencia tranquila». Tras los pertinentes agradecimientos, Ramos ha desvelado que su regreso perseguía dos objetivos : honrar a José Antonio Reyes, Antonio Puerta, su abuelo y a su padre, por un lado, además de cerrar la herida abierta con el sevillismo.