Qué desastre, viejo
Cómo me he acordado, viejo, de tu cumpleaños de hace dieciocho años. Ese día, 25 de agosto, le metimos tres cero al Barcelona en la final de la Supercopa de Europa. Vimos el partido, ¿recuerdas?, mientras cenábamos, toda la familia junta, y en la victoria histórica del Sevilla te emocionaste, lloraste de felicidad. Qué gloria te dio el Sevilla en esos años. Incluso el año pasado, en la última final de la Europa League, también te emocionaste, y mira que la temporada había sido perra. Te fuiste, viejo, apenas dos semanas antes de que Diego Alonso se marchara del club, pero ya entonces hablábamos del tamaño de la ruina sevillista. No llegaste a tiempo de ver a Quique Sánchez Flores... Ver Más